Carolina Isava – Opinión
Veo que los Morel han perdido facultades en estrategia política y, desde hace un buen tiempo a esta parte, actúan por emoción y muchas pasiones, al punto de llevar lo personal a lo político, un error grave. Los errores en política se pagan y con intereses muy altos, es bien sabido.
Este empeño por vengarse de Mairym Bruzual por lo de la «Memoria y Cuenta», la cual evidentemente no pasaba el filtro, ni queriendo, los llevó a tomar la que podría ser una de sus peores decisiones en su ya longeva trayectoria: pactar con el PSUV.
Una cosa es que ellos, los del PSUV, tomaran la presidencia cuadrando sus votos; y otra muy distinta es que Morel les entregue la presidencia del Clebne con sus 3 votos en un año electoral a cambio de nada o de muy poco. Que en este caso sigue siendo nada, visto el altísimo costo reputacional que están pagando.
Y como las desgracias no vienen solas, la gracia se les convirtió en morisqueta cuando el diputado «Rosquero”, perdón Ronderos, aprovechó el mar de leva para pescar su sardina, dejando por fuera del cardumen a Carlos Beaufond. Este último, una vez más, deberá esperar hasta el 2025, y si no pasan otras cosas, entrar nuevamente en la terna que podría devolverlo a su ansiado cargo de secretario legislativo.
Como es de todos conocido, en política no hay nada escrito y, encima, mi imaginación es muy creativa, por lo que los invito a que hagamos un ejercicio predictivo. El año recién comienza, es buen tiempo para hacer pronósticos y augurios:
Escenario 1:
El pacto Morel-PSUV, navega con buen viento y la improbación de la «Memoria y Cuenta» consigue una gaveta donde dormir en la Contraloría.
Escenario 2:
No habiendo suficiente tippex para borrar las incongruencias, el Pacto Morel-PSUV se queda a medio motor entre Margarita y Coche; y Morel recibe una sanción leve por parte de la Contraloría.
Escenario 3:
La mar se pone embravecida, el PSUV decide salvar una sola lancha y entre el humo y la neblina, la Contraloría sanciona, inhabilita y destituye a Morel Rodríguez de la Gobernación. Acto seguido designan a la nueva presidenta de Clebne como Gobernadora encargada y la santísima trinidad roblera redescubre que en política las listas de amigos se escriben con lápiz de grafito.
Es que cuando se pierde la brújula política y la pasión se impone a la razón, te toma tiempo entender que odiar es como tomarte el veneno y esperar que el otro sea el que se muera.
La historia está llena de casos que demuestran que en política quien ayer fue tu adversario mañana puede ser tu gran aliado, pero también en los que las armas con las que hoy matas mañana pueden ser utilizadas para tu propio martirio.
Poco veneno no mata, es verdad, pero ataranta; y este parece haber sido el caso. La dinastía de Los Robles decidió tomar una ración pequeña de toxina para curarse una vieja herida, pero la única diferencia entre el veneno y el remedio es la cantidad de la dosis. Esta vez se les pasó la mano y me temo que la ponzoña se les convirtió en cicuta.
Esta audacia política en el consejo legislativo se les podría tornar en una operación «Chacumbele», como reza la sabiduría popular.
Por otra parte me gustaría ver y escuchar las razones que asisten a todos aquellos que el año pasado se dedicaron a denostar de la Legisladora Bruzual con los peores calificativos y los insultos más subidos de tono, por haber pactado con el PSUV, pero ayer casi que orgullosos levantaron hasta las dos manos para encumbrar al PSUV y entregarle la pala que les podría cavar su tumba o, peor aún, hundir la lancha Nueva Esparta.
Definitivamente… en política no hay nada escrito!
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