Una nueva muerte bajo custodia se registra en Venezuela: un policía preso falleció la madrugada del jueves 7 de julio en la sede de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM) en el estado Apure, por presunto asfixia por inmersión como consecuencia de las torturas aplicadas.
El funcionario fallecido fue identificado como Juan Pantoja, quien era detective agregado del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC), que estaba adscrito a la Delegación Estatal Apure y de comisión de servicio en la Universidad Nacional de la Seguridad (UNES).
Pantoja había sido detenido el martes 5 de julio por averiguaciones por presunta extorsión. Al día siguiente, en horas de la tarde, fue llevado hasta la sede CICPC en San Fernando, donde trabajaba, para ser reseñado. Allí, Pantoja pudo informar a sus compañeros que estaba siendo torturando constantemente por los funcionarios de la DGCIM que lo detuvieron y que temía por su vida.
Horas más tarde, la mañana del jueves 7 de julio, funcionarios del CICPC tuvieron conocimiento de la muerte de Pantoja. Sin embargo, al trasladarse a la sede de la DGCIM con un médico forense para iniciar las averiguaciones, les impidieron el ingreso y se negaron a entregarles el cuerpo.
La abogada defensora de derechos humanos y directora del Instituto Casla, Tamara Suju, denunció que la muerte habría sido causada por ahogamiento. “Fue sumergido en una pipa de 200 litros que había en el lugar”, detalló.
Suju alertó que las autoridades “van a tapar de nuevo las barbaries”, al denunciar que el director del CICPC, Douglas Rico, habría ordenado a los funcionarios en Apure que se retiraran de la sede de la DGCIM y desistieran de averiguar sobre las causas de la muerte de su compañero.
Con información de Monitoreamos.com
