Trujilllo necesita verdaderas soluciones a nuestros problemas, no maquillajes que buscan ocultar la realidad.
Hay que impulsar obras y políticas públicas que perduren en el tiempo, que vayan hacia el crecimiento y desarrollo de nuestro estado, que mejoren el presente pero a su vez se puedan crear mayores y mejores oportunidades en el futuro. En el balance de los 100 días del gobernador Gerardo Márquez, podemos analizar que su gestión está dedicada a sólo maquillar los problemas del estado y no a buscarle una solución estructural a los mismos.
Generalmente los primeros 100 días de gestión marcan la ruta de un gobernante y hasta ahora no vemos que se desarrolle un verdadero plan de gestión que lleve a los trujillanos a mejorar su calidad de vida de cara al futuro, solo se están colocando «trapitos de agua tibia» a los principales problemas del estado.
Ejemplos de ello es que no hay un plan a desarrollar para impulsar el turísmo en nuestro estado; así como tampoco se ve el apoyo a nuestros agricultores para fortalecer la producción.
No hay políticas de mejoramiento de nuestras estructuras educativas y de salud. No existe un plan de seguridad ciudadana que proteja a los trujillanos de la delincuencia organizada, entre otros.
En materia de servicios públicos, no hay voluntad de una solución estructural al problema, ejemplo de ello es el acueducto de Valera.
Resulta ser, que solo serán supuestamente reparadas las 8 bombas del acueducto, cuando lo que realmente se requiere es la construcción de uno nuevo o la renovación total de estás bombas ya obsoletas.
A su vez estamos viendo la colocación de algunas lámparas en Valera, mientras seguimos teniendo la gran mayoría de las comunidades totalmente a oscuras y lo que es peor, mantienen el inhumano racionamiento eléctrico de hasta 6 horas diarias, lo que afecta la tranquilidad de los trujillanos.
Y ni hablar del servicio del aseo urbano, la mayoría de nuestros municipios están llenos de basura por todos lados ante la ineficiencia y la poca inversión.
No sé si el gobernador hizo anuncios de los 100 días de gobierno o 100 días de campaña electoral, esto lo decimos porque sigue siendo todo puras promesas, ofrecimientos y no hechos reales que podamos decir que pudiera mejorar la situación de los problemas en nuestro estado en el futuro.
Le quiero recordar al gobernador otros ofrecimientos que hizo, como lo fué la reactivación del aeropuerto de Carvajal, la culminación del Seguro Social de Trujillo, el mejoramiento de las vías agrícolas, la entrega de las bolsas de comida cada 15 días.
El gobernador hasta ahora solo esta dándole continuidad a los gobiernos de Hugo Cabezas y Rangel Silva, maquillando el deterioro que ellos dejaron pero sin ningún cambio estructural. Invitamos al gobernador a repensar su gestión, a entender cuáles son las verdaderas necesidades de Trujillo, que se trabaje en función a un cambio real y a mejorar la calidad de vida de todos los trujillanos.
Cómo Legislador electo por el pueblo de Trujillo, he aprobado varios créditos adicionales, así como también el presupuesto del estado, siempre condicionando mi voto a que se invierta en las necesidades de nuestra gente.
Estaremos con la lupa siempre atentos, haremos contraloría y representando y defendiendo los intereses de nuestro pueblo.