El Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (OVCS) registró un total de 671 protestas en el país durante el mes de julio, para un promedio de 22 diarias, de acuerdo a su informe mensual.
Esta cifra representa un aumento del 3% en comparación con el mismo mes el año pasado, cuando hubo 649 manifestaciones. Durante el primer trimestre del año, el OVCS reportó una disminución del 23% en comparación con el mismo periodo en 2020, al registrar 3.393 protestas.
La mayoría de las protestas del mes pasado, el 66% o 442 de ellas, fueron para exigir Derechos Económicos, Sociales, Culturales y Ambientales o DESCA. “Se mantienen las exigencias de servicios básicos, y se incrementaron los reclamos por déficit en la distribución y venta de combustible, fallas en la recolección de aguas servidas, servicio de internet, alumbrado público y vialidad», indica el Observatorio.
Al revisar los derechos más demandados, el primero en la lista está a los servicios básicos (185 protestas), entre los que están el agua potable, electricidad y gas doméstico.
Le siguen los derechos laborales, con 173 protestas. El observatorio explica que una de las exigencias generalizadas en esta área es la “es la resignificación y dolarización del sueldo”.
En julio también hubo protestas vinculadas a la aprobación o rechazo a las elecciones regionales convocadas para el próximo 21 de noviembre, que entrarían en el derecho a la participación política, el tercero en la lista, con152 protestas.
“Los venezolanos siguen exigiendo el respeto a la dignidad humana a los actuales gestores del Estado y la única respuesta es silencio y represión”, concluye el reporte, compartido por la ONG en redes sociales.
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