El flujo de migrantes de diferentes nacionalidades que llegan a esta frontera para entregarse a la Patrulla Fronteriza se sigue viendo durante toda la mañana, al igual que poco más de 50 migrantes venezolanos que deambulan por las calles.
Luego que fuera eliminado el campamento venezolano, muchos migrantes decidieron acudir a los albergues, otros empezaron a trabajar y sostenerse por ellos mismos, sin embargo, son varios los que están en la calle asechados y tentados por traficantes.
Por las calles Cobre, Plomo, Estaño que cruzan con Dalias, venezolanos caminan toda la mañana, algunos aprovechan el sol para dormir tirados en las calles.
Los consumidores de drogas, no les importa que la gente pase por allí, ellos fuman marihuana como si fuera nicotina.
Por el lado del bulevar Norzagaray, también se ven los migrantes en los negocios de carwash y desponchadora, cabe destacar que algunos de ellos trabajando.
También en el crucero del bulevar y la calle Oro, otros están trabajando, vendiendo dulces y limpiando vidrios, pero insisten que no se irán al albergue.
Por parte de Óscar Ibáñez, representante de la gobernadora, dijo que se sigue invitando a migrantes a ingresar a albergues que ofrecen los gobiernos.