Imagen ilustrativa Karim Sahib / AFP
Un cocinero que trabajaba en un salón de bodas en la gobernación iraquí de Dohuk, en el norte del país, murió pocos días después de caer accidentalmente en una gigantesca olla en la que preparaba los alimentos que serían servidos en un evento, informan medios locales.
Según contó el padre del fallecido, Muhammed Ismail, el accidente ocurrió a mediados de este mes cuando su hijo, Issa, perdió el equilibrio al desplazarse por la cocina mientras trabajaba y cayó en una enorme olla de caldo de pollo hirviendo, sufriendo quemaduras en el 67 % de su cuerpo, algunas de ellas de consideración.
El chef, de 25 años, fue trasladado de emergencia a un hospital local para ser atendido por médicos especialistas. Sin embargo, debido a la gravedad de sus lesiones, perdió la vida cinco días después de haber sido internado.
La víctima, comentó otro de sus familiares, tenía ocho años de experiencia como cocinero preparando menús para grandes eventos. Asimismo, señaló que el joven era el padre de dos niñas y de un bebé de seis meses, por lo que durante el último par de años tenía dos empleos en distintos salones para eventos .