Durante más de cinco años, miles de familias se han separado. Sus miembros han tenido que repartirse por todo el mundo ¿La razón? Buscar mejores oportunidades, mayor calidad de vida e ingresos.
Según datos de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), más de 5,4 millones de venezolanos han abandonado su país este siglo. Según algunas estimaciones, esta cifra ya superó los 6 millones.
La historia es lamentable y ha destrozado el corazón de cientos de miles de padres. Pero más allá de las consecuencias emocionales y sociales, ha tenido un impacto económico importante para el país.
Venezuela se convirtió en un país receptor de remesas. Los últimos datos verificados por Econométrica estiman que los venezolanos recibieron unos 4.000 millones de dólares en remesas. Esto equivale a un 10% del Producto Interno Bruto (PIB) del país.
Aunque sea un porcentaje muy elevado, todavía queda por debajo de otros países de África, Asia y Centroamérica. De acuerdo con estadísticas del reporte sobre migración y desarrollo de Knomad, los países que reciben remesas que más peso tienen en su PIB son Tonga (38%), Líbano (33%), República Kirguisa (29%), Tayikistán (27%) y El Salvador (24%).
Dentro o fuera del top, las remesas son esenciales para la economía venezolana. Incluso fueron un factor fundamental para el proceso de dolarización que ha atravesado el país.
Enviar dinero a Venezuela se convirtió en una obligación para todo migrante. En promedio, cada venezolano en el extranjero envía aproximadamente 150 dólares mensualmente a su familia.
Esto quiere decir que hay una masa impresionante de operaciones financieras. Transferencias bancarias, traspasos digitales e incluso el uso de criptomonedas.
Las divisas utilizadas en estas operaciones van de bitcoin a dólar, pasando por euro, peso colombiano, peso chileno, peso argentino, sol peruano y un montón más.
Pese a este vaivén de dinero, es importante tener en cuenta que Venezuela posee una economía restringida. El sistema bancario no tiene una apertura internacional. Así es como se crea una necesidad en Venezuela: servicios para transferir dinero internacionalmente.
¿Cómo transferir dinero a Venezuela?
La evolución de los servicios financieros; gracias a la tecnología moderna han abierto un mundo de posibilidades para movilizar dinero internacionalmente.
Sin embargo, todavía hay mucho por trabajar para mejorar la eficiencia de estos servicios. El sistema bancario se caracteriza por su demora y sus altos precios.
A pesar de ello, sigue siendo el método más común para enviar dinero a Venezuela. El emigrante utiliza a un tercero para triangular la transacción internacional. Entonces, le da su dinero en divisas extranjeras; el tercero se lo queda, con su comisión incluida; y utiliza una cuenta en Venezuela para transferir al familiar del cliente.
Mediante este método, el cliente pierde hasta un 20% del dinero que intenta enviar en comisiones. Entonces, si la intención era enviar 200 dólares, el familiar solo recibirá 160.
Este mecanismo era utilizado especialmente en los primeros momentos de la diáspora. Pero debido a la gran cantidad de dinero que se perdía en el camino, se intentaron buscar alternativas.
El uso de PayPal y plataformas como AirTM para convertir dólares a bolívares se popularizó. Pero nuevamente hablamos de un esquema en el que se pierde un 20% del dinero; debido a las comisiones de ambos servicios.
Progresivamente otros servicios como Zelle o Skrill hicieron aparición para el pago de bienes y servicios con divisas. Sin embargo, ninguno resolvió la necesidad concreta de las remesas.
Lo que no muchos sabían es que ya existía un mecanismo perfecto para estas operaciones. Fue lanzado en 2009 y creó todo una industria que facilita transacciones internacionales. Así es, hacemos referencia a las criptomonedas.
Criptomonedas: Transacciones sin barreras
La tecnología blockchain, en la que se sustenta toda criptomoneda, trabaja con un esquema compatible con las transacciones internacionales.
Mientras que la criptografía da garantías de seguridad e invulnerabilidad en la red, la descentralización incrementa la velocidad y reduce las comisiones. Finalmente, internet hace el trabajo de traspasar fronteras y posibilitar transacciones desde cualquier lugar del mundo.
Estas características convirtieron a las criptomonedas en el mejor aliado del migrante a la hora de enviar dinero a sus familias. Es así que muchas personas han averiguado cómo comprar criptomonedas en Venezuela. Ya que sólo se requiere la creación de una billetera de criptoactivos y un dispositivo con conexión a internet. En esa wallet se puede almacenar el dinero y enviarlo a otra dirección.
Por supuesto, esta industria presenta dos características: su aparente complejidad técnica y la volatilidad de los criptoactivos. Muchos suelen verlos como problemas; pero ambas barreras tienen respuestas muy simples.
Una exchange es la solución para el migrante que tenga dudas con respecto al uso de criptomonedas. En primer lugar, porque automatiza muchos procesos; en segundo, porque permite cambiar un criptoactivo por otro.
Entonces, si la volatilidad es una preocupación, las exchanges permiten convertir bitcoin a dólar. Con un par de clicks, se eliminan los miedos de que el precio del BTC caiga.
Las exchanges de criptomonedas exigen requisitos muy básicos. Para crear una cuenta tan sólo es necesario un correo electrónico válido. Luego, para verificarla y hacer transacciones, piden comprobar la identidad del usuario mediante su cédula de identidad.
Con tal simpleza, las criptomonedas ahorran el tiempo y el esfuerzo que requeriría acudir a un banco, con papeles en mano, para la apertura de una cuenta bancaria.
Administra tus criptomonedas
Siendo usuario de criptomonedas a través de una exchange, no sólo puedes cambiar BTC a dólar, sino también a muchas otras criptomonedas.
Desde Venezuela concretamente, operar con dólares virtuales es complicado. La persona necesitaría una cuenta bancaria internacional. Pero ese problema puede resolverse a través de criptomonedas como tether (USDT), que están ancladas al dólar.
Utilizar USDT es, en términos prácticos, lo mismo que tener dólares virtuales. Al ahorrar con USDT se evita la devaluación de la moneda.
Efectuar estos cambios de BTC a USDT es sumamente simple. El proceso se completa en unos pocos minutos y requiere un par de clicks. Es recomendable usar una calculadora bitcoin a dólar para hacer el cálculo del dinero que corresponde, pues el valor de bitcoin cambia constantemente.
Pero la función de una exchange no queda allí. Son plataformas muy versátiles que tienen una variedad enorme de funciones.
Por ejemplo, en Remitano puedes hacer trading con su opción de Swing. También puedes minar RENEC, su token nativo recién lanzado. Inclusive, puedes aprovechar eventos de temporada como el Simple Sale 10.10, donde obtienes un reembolso por tus transacciones realizadas en su plataforma.
Ya sea que desees enviar remesas a tu familia o invertir en el mercado de las criptodivisas, las exchanges son el mecanismo más completo para administrar tu dinero.