Ni el guionista mas experimentado del cine podría haber pensado en un desenlace más oportuno para el triunfo de Suiza sobre Camerún 1 a 0. La crueldad del destino jugó un papel importante, puesto que el gol conseguido por el delantero del Mónaco, Breel Embolo, fue suficiente para que los “leones indomables” fueran domados.
Embolo nacido en Camerún y de padres cameruneses, que juega para la selección Suiza, fue el encargado de sepultar las aspiraciones del equipo africano, quien regresa a los mundiales depues de ocho años de ausencia.
Camerún, fue superior a Suiza en el primer tiempo y aunque no acaparó la posesión tuvo las mejores ocasiones. Las transiciones de Andre Anguissa y el excelso juego de espaldas de Eric Choupo-Moting hacían hacer peligroso a los leones de africanos. Toko Ekambi remató sin ver puerta tras un mal despeje del portero suizo Yam Sommer los 10′. El propio Sommer desvió a los 30′ un tiro cruzado del Martín Hongla.
Todo cambió en el segundo tramo, y al minuto 3 de esta etapa Remo Freuler abrió sobre la subida de Shaqiri por derecha y sirvió el pase atrás para que Embolo marcara a placer el unico gol del encuentro.
Camerun no tuvo mas nada, se quedo sin el impulso del primer tiempo y aunque no fue abrumadora el dominio suizo, fue suficiente para controlar el juego.
Suiza tuvo dos ocaciones más de conseguir el segundo gol, en el minuto 66 Silvan Widmer ganó línea de fondo y cedió al punto de penalti para Rubén Vargas haciendo lucir al portero camerunes Andre Onana quien la mandó al corner; e inmediatamente después el saque de esquina también trajo peligro. Anguissa evitó el doblete de Embolo, que se disponía a empujar sobre la línea un centro de Shaqiri.
Asi que Suiza puntea el grupo E, espeerando el partido entre Brasi y Serbia. Teniendo como proximo rival la pentacampeona sudamericana.
Fuente: Marca.com