Durante el acto conmemorativo en el Aula Magna de Montalbán, transmitido en vivo para la sede Guayana, el sacerdote jesuita afirmó que la aspiración de la universidad sigue siendo «generar ciudadanía», «abrir nuevos diálogos y nuevas narrativas» y ser una institución inclusiva, «porque no va a ser posible un país en un contexto de máxima pobreza, sino con gente suficientemente preparada que pueda enfrentar los retos del siglo XXI».
Con un evento de poco más de una hora, realizado en el Aula Magna de su sede Montalbán, la Universidad Católica Andrés Bello celebró sus 70 años de su fundación y mostró su evolución, de una modesta casa de estudios en la esquina Jesuitas, en el centro de Caracas, a una institución consolidada como la mejor universidad privada de Venezuela, con un moderno campus levantado en lo que fue parte de la antigua Hacienda Montalbán y una extraordinaria extensión en Ciudad Guayana, estado Bolívar.
Las máximas autoridades de la UCAB y su canciller, el cardenal Baltazar Porras, arzobispo de Caracas, fueron anfitriones de representantes del cuerpo diplomático, expertos de distintas áreas del saber nacional, directivos y miembros de las
Academias Nacionales, autoridades de universidades fraternas, empresarios, egresados y clérigos de distintas órdenes.
La festividad, que también sirvió para bautizar el libro 70 años de la UCAB, coordinado por el profesor José Luis Da Silva, director del Secretariado de Investigación y Transferencia de la universidad, tuvo como broche, para cerrar, una muy aplaudida interpretación del flautista Luis Julio Toro, fundador del Ensamble Gurrufío.
El cardenal Porras dijo que «esta celebración nos hace ver el pasado para saber dónde estamos y a dónde queremos ir. La UCAB no nació enmantillada, ha podido ser por ese esfuerzo continuo y que mira hacia el futuro y que la convierte en una de las grandes universidades de América Latina y el mundo». Por su parte, en un mensaje transmitido desde Roma, el prepósito general de la Compañía de Jesús, Arturo Sosa Abascal, saludó a su alma mater y afirmó que «la UCAB está más viva que nunca y más consciente del servicio que debe prestarle a un país sumergido en una crisis profunda».
«Los que llevamos a la UCAB en el corazón tenemos motivos para estar de fiesta. Que una institución educativa de profunda vocación social alcance 70 años de historia en Venezuela no es poca cosa, con más de un tercio de estudiantes becados, con reseñas continuas de mejoras en los rankings internacionales, con la disciplina de repensarse permanentemente para ofrecer una formación integral y de alta calidad acorde con nuestros desafiantes tiempos, con los valores ignacianos siempre como referencia, con investigaciones que contribuyen al desarrollo del país, con una labor intensa en las comunidades y la incorporación de nuevas titulaciones», dijo Sosa a la audiencia, gracias a la conexión telemática.
Semillas de futuro
El hilo central que conectó las participaciones, discursos y performances que entretuvieron al público que colmó el recinto fue la alegoría de una semilla que, poco a poco, echa raíces, crece y se robustece, lo que se completó con la entrega a cada asistente de un sobre contentivo de semillas de apamate, con sus respectivas instrucciones para la siembra y cuidado.
El acto se caracterizó por su frescura y la participación destacada, como presentadores, de jóvenes estudiantes de distintas carreras, vestidos con los atuendos casuales que usan en su día a día en el campus.
El diseño del evento -que se transmitió a través de YouTube para conectar a los miembros de UCAB Guayana y a los egresados en todo el mundo- incluyó aspectos clave que han marcado la impronta de la Compañía de Jesús en el quehacer ucabista.
Así, la ceremonia abrió con el himno nacional, cantado por un grupo de niños de la U.E. «Luis María Olaso» de Fe y Alegría, ubicado en la parte alta de la parroquia La Vega de Caracas, donde la Extensión Social de la UCAB mantiene alianzas de
trabajo comunitario en distintos ámbitos.
Esto sirvió para recordar que lo que es hoy una organización con presencia en 22 países nació como un proyecto del Voluntariado de la UCAB.
Seguidamente, se presentó el documental oficial por los 70 años, el cual mostró, entre otros aspectos, una recopilación de los hitos más importantes del nacimiento de la UCAB, relatados por quien fue su rector desde 1990 a 2010, el padre Luis Ugalde, S.J.
El audiovisual también contó con los testimonios de autoridades y profesores de la universidad, involucrados en su transformación para enfrentar los retos de la educación superior en el siglo XXI.