La mutación del coronavirus conocida como Epsilon, registrada por primera vez en California, comenzó a generar alarma, especialmente a partir de un estudio realizado por el bioquímico de la Universidad de Washington, en Seattle, EEUU, Matthew McCallum, publicado en la revista Science, donde advierte sobre la resistencia de esa variante a algunas vacunas.
Por infobae.com
Si bien, en las últimas semanas la atención del mundo en torno de la pandemia se centran en la alta contagiosidad que está demostrando la variante Delta, científicos se encuentran abocados a determinar la peligrosidad de la Epsilon
En ese sentido, el infectólogo Eduardo López restó importancia por el momento a esa mutación porque “ya tenemos bastante con Delta” que es de circulación mundial. Epsilon “está empezando a circular, hay que ver si este impacto es tan importante o no, habrá que esperar un poco”, dijo.
“Las variantes aparecen cuando usted tiene poca gente vacunada y mucha población susceptible. Para generar una variante el virus se tiene que reproducir en el cuerpo humano, cuanto menos gente tengamos vacunada y/o que no haya padecido la enfermedad usted tiene mayor chance de que los virus vayan variando, vayan cambiando su conformación genómica”, explicó.
“En ese aspecto me parece que uno tiene que preocuparse mucho más por vacunarse y por las sepas que son de distribución mundial porque la epsilon por ahora es regional”, aún cuando hay casos ya detectados en la Argentina, señaló.
El Ministerio de Salud de la Nación informó hasta ahora cinco casos de variante delta en el país, pero no circulación comunitaria. El viernes pasado esa cartera y el Instituto Malbrán informaron a Infobae que fueron detectadas dos personas con variante Delta de coronavirus en el país, pero aseguraron que Argentina no registra circulación comunitaria de esta variante de preocupación. Se trata de dos personas que antes de subir al avión habían realizado un examen de COVID-19 con PCR negativo. Sobre los nuevos dos casos, la cartera sanitaria informó que el primero se trata de un viajero de 42 años, residente de la Ciudad de Buenos Aires, que arribó al país el 15 de junio desde Miami. El pasajero presentó una prueba de PCR negativa previa al vuelo y un test de antígeno también negativo realizado al arribar al país.
El 21 de junio último la cartera sanitaria desde su cuenta en Twitter informó que el Laboratorio Nacional de Referencia ANLIS-Malbrán detectó la variante Delta en un viajero positivo proveniente de Estados Unidos. “Se trata de un hombre de 26 años que llegó al país el día 4 de junio procedente de Estados Unidos. Al momento del arribo, el pasajero presentaba una PCR negativa realizada 48 horas previas al viaje, y al ingresar al país presentó test de antígeno positivo y se derivó la muestra al laboratorio de referencia para el análisis genómico”, indicó la Q’ Pasa en Venezuela emitida por la institución sanitaria.
Antes, el 10 de junio pasado, la directora de Migraciones, Florencia Carignano, confirmó que se detectaron dos casos de coronavirus de la variante Delta. Aún con esos casos individualizados, el Ministerio de Salud destacó que la variante Delta aún no es de circulación comunitaria.
El avance de la Delta, surgida en India, fue lo que motivó al gobierno argentino a modificar su estrategia de vacunación que, en un comienzo, se centró en inocular a la mayor cantidad de población posible con la primeras dosis y ahora avanza con las segundas dosis, ya que los especialistas dicen que son imprescindibles para evitar que, la inevitable llegada de la tercera ola, genere un efecto devastador.
En cuanto a Epsilon, ya fue incluida entre las “variantes de cuidado” por la Organización Mundial de la Salud es objeto de estudio del equipo comandado por McCullam, quien publicó en la revista Science un análisis basado en 57 muestras, en las que observó tres mutaciones que la hacen resistente a los anticuerpos y que se hallan en la proteína spike, que es el medio del que se sirve el virus para entrar en las células.
La relevancia del estudio se basa en que la epsilon se mostró resistente tanto a los anticuerpos que genera el virus SARS-CoV-2 como a los de las vacunas de ARN mensajero, como las fabricadas por Moderna y Pfizer.
McCullan analizó el plasma de 15 personas inoculadas con dos dosis de Moderna, 33 vacunadas con dos dosis de Pfizer y nueve que se habían contagiado de COVID-19.
La mutación Epsilon fue hallada a comienzos de 2021 en California, Estados Unidos, y para mayo ya se había expandido en otros 34 países. Según el banco de datos Gisaid relativos a las últimas cuatro semanas ya está presente en 44 países, que incluyen Estados Unidos, Corea del Sur, India y Japón.
La investigación publicada en Science puntualizó que epsilon es “una nueva variante preocupante (VOC) llamada CAL.20C (B.1.427 / B.1.429), originalmente detectada en California” que “porta mutaciones de glicoproteína de pico S13I en el péptido señal, W152C en el dominio N-terminal (NTD) y L452R en el dominio de unión al receptor (RBD)”.
“El plasma de individuos vacunados con una vacuna de ARNm a base de aislamiento de Wuhan-1 o de individuos convalecientes exhibió títulos neutralizantes, que se redujeron 2-3.5 veces contra la variante B.1.427 / B.1.429 en relación con los pseudovirus de tipo salvaje. La mutación L452R redujo la actividad neutralizante de 14 de los 34 anticuerpos monoclonales (mAb) específicos de RBD. Las mutaciones S13I y W152C dieron como resultado una pérdida total de neutralización para 10 de cada 10 mAb específicos de NTD, ya que el superitio antigénico de NTD fue remodelado por un cambio del sitio de escisión del péptido señal y la formación de un nuevo enlace disulfuro”, puntualizó en su descripción técnica del estudio.
En Argentina fueron detectados cinco casos positivos de epsilon, dos en Córdoba (tres en Río Tercero y una en la capital cordobesa) y otro en Santa Fe, informó el Proyecto Argentino Interinstitucional de Genómica (Pais).
Identificada por primera vez a comienzos de 2021 en California, en mayo la variante Epsilon se había difundido en otros 34 países y según el banco de datos Gisaid, relativos a las últimas cuatro semanas, ya está presente en 44 países, de Estados Unidos a Corea del Sur, India y Japón.