Las venezolanas Geraldine y Samaira, ambas de 32 años, conforman una familia homoparental. Hace 14 años que comparten sus vidas. En 2020, durante la pandemia, decidieron en España tener un bebé propio. Su hija nació en Venezuela.
Por vozdeamerica
Aliana, de 2 años, tiene dos mamás, a una la llama “mami” y a la otra “mamá”: es la hija de una pareja homoparental en Venezuela, un país tradicionalmente conservador y sin leyes que reconozcan el matrimonio igualitario o a las familias homoparentales.
Geraldine Trujillo y Samaira Patiño, ambas de 32 años y juntas desde hace 14, decidieron dar el paso de tener un bebé propio en 2020 cuando quedaron atrapadas por la pandemia en España. Y con un donante iniciaron el proceso de inseminación artificial: el primer intento, fallido; el segundo, embarazo.
“En Venezuela es súper no convencional, pero sí se hace, lo íbamos a hacer aquí. Lo que pasa es que nos tomó por sorpresa la pandemia en España y lo hicimos allá”, dice Trujillo a la Voz de América en su casa en Caracas.
No obstante, la pareja se refiere a la poca o nula contraloría por parte del Estado venezolano para garantizar la calidad en los bancos de semen.
Aliana nació en Caracas y legalmente es hija de Patiño, que la presentó como madre soltera para evitar obstáculos y retrasos burocráticos en el registro.
En Venezuela, este tipo de relación, aunque en algunos casos se ha reconocido, aún no es legal. Las leyes todavía exigen que el matrimonio sea entre un hombre y una mujer.