Alfredo Infante, además de dar sus condolencias por los caídos y lamentar las detenciones arbitrarias, recordó a los desplazados
El padre Alfredo Infante, párroco del templo San Alberto Hurtado (parte alta de La Vega), envió un mensaje de aliento y solidaridad con las víctimas en nombre de los sacerdotes y vicarias de todas las zonas que fueron afectadas por la balacera de tres días que se registró en la Cota 905 y afectó al menos siete parroquias del oeste del Distrito Capital.
El cura, por medio de una nota de voz difundida en Whatsapp, describió los días de los tiroteos como jornadas de “angustia, miedo, impotencia e indignación” motivada por “un contexto de guerra que atenta contra la vida, la dignidad humana, el bien común y el sueño de una Venezuela fraterna”.
Recalcó Infante que los hechos han golpeado la estabilidad emocional y material no solo de los habitantes de la Cota 905, sino también de zonas como El Paraíso, La Vega, Montalbán, El Cementerio, San Agustín, El Valle, San Martín, Quinta Crespo, entre otros sectores de Caracas.
El sacerdote, además de dar sus condolencias a los familiares de los caídos y lamentar las detenciones arbitrarias de jóvenes solo por vivir en barrios, recordó a los desplazados.
“Nuestra cercanía y oración por aquellas familias que se han visto forzadas, por la violencia indiscriminada, a dejar su lugar de residencia y sus pertenencias para salvar la vida (…) Nuestra solidaridad, apoyo y compromiso para trabajar por la paz y para que se respeten sus derechos humanos y así construir una Venezuela donde no haya desplazados internos por la violencia”, dijo en el audio.
Infante agradeció a organizaciones de derechos humanos y medios de comunicación por la ayuda y apoyo prestado.