Los organizadores de la marcha neonazi que tuvo lugar hace cuatro años en Charlottesville (Virginia, EE.UU.) tendrán que pagar 25 millones de dólares a los contramanifestantes que resultaron heridos, dictaminó este martes un jurado popular.
El fallo del jurado se dirige contra 12 individuos y 5 organizaciones de la marcha “Unite the Right” (“Unir a la derecha”), en la que más de 50 personas resultaron heridas y una mujer de 32 de años murió al ser embestida por el automóvil que conducía un neonazi.
Entre los acusados figuran algunos de los supremacistas blancos más conocidos en EE.UU., como Jason Kessler, el organizador principal de la marcha, y Christopher Cantwell, que pasó a ser conocido como el “nazi llorón” después de que circulara por redes sociales un video en el que se le ve reaccionar de manera emocional a una orden de arresto en otro caso diferente.
El procedimiento se abrió a raíz de la demanda que interpusieron cuatro hombres y cinco mujeres que resultaron heridos durante la violencia que se desató en la marcha.
Tres de los demandantes sufrieron conmociones cerebrales, uno de ellos tuvo una fractura de cráneo y la mayoría asegura experimentar trastornos de estrés postraumático, lo que les provoca insomnio, incapacidad para concentrarse y ataques de pánico.
Pese a los 25 millones de dólares en daños, el fallo no fue completamente favorable para los demandantes.
En concreto, el jurado popular no pudo llegar a un acuerdo sobre dos cargos federales con los que se argumentaba que los organizadores de la marcha habían conspirado para cometer actos violentos motivados por ideas racistas.
El 11 y 12 de agosto de 2017, un grupo de neonazis se manifestó por las calles de Charlottesville con antorchas y entonando consignas xenófobas con el objetivo de protestar por la retirada de una estatua de Robert E. Lee, un general esclavista de la Confederación durante la guerra civil de EE.UU.
Esa protesta fue contestada por una marcha antifascista que pedía a los neonazis que se fueran de Charlottesville.
Fue en ese momento cuando el neonazi James Alex Fields Jr. tomó su vehículo y atropelló a la multitud de los contramanifestantes, que provocó la muerte de la mujer de 32 años Heather Heyer, un suceso que fue capturado en video y que sacudió a Estados Unidos.
En ese contexto, el entonces presidente de EE.UU., Donald Trump, provocó una gran polémica al responsabilizar de la violencia tanto a los grupos neonazis como a los manifestantes de izquierda y, además, llegó a considerar que había gente “muy buena” entre los supremacistas.
Durante los incidentes, también murieron dos policías en un accidente de helicóptero cuando acudían a sofocar las protestas.
EFE