Danna Urdaneta, investigadora del conflicto social y armado en Colombia, paramilitarismo y nuevas guerras en la frontera colombo-venezolana y secretaria de investigación de la Fundación Escuela de Gobierno Mundo y Fronteras, opina que la normalización de relaciones entre ambos países avanza a “paso lento” pese a la apertura de los linderos comunes.
“El intercambio comercial (en San Antonio del Táchira y Norte de Santander) no supera el de Paraguachón en el estado Zulia, con Maicao en la Guajira”, destacó.
Urdaneta precisó que en Paraguachón este año el intercambio alcanzó los 86.9 millones millones y en San Antonio del Táchira apenas van por 24,4 millones millones, según la presidenta de la Federación de Agentes Logísticos en Comercio Internacional.
A su juicio, “estas cifras denotan el panorama de cómo han avanzado a paso lento las relaciones comerciales hasta hora”.
Urdaneta considera que además del tema económico, los gobiernos centrales de ambos países deberían informar sobre el avance en materia política y de seguridad, como el paramilitarismo. “Ni siquiera en las declaraciones conjuntas realizadas hasta ahora se menciona la palabra paramilitarismo no se habla de paramilitarismo, ni se menciona la presencia del (las autodefensas) Frente Luis Hernando Peña”.
“Se habla de lucha contra el narcotráfico (…) de la paz total y de la seguridad en la frontera pero no se habla de las causas que originan el conflicto ni de las nuevas guerras en la frontera colombo/venezolana”, subrayó.
Asimismo, destacó que no existe un acuerdo binacional por el desmonte paramilitar ni de la recuperación social de la frontera. ”No se habla de inversión social”.
Considera que otro tema que preocupa es el de la migración “que tenemos por lo menos 2.5 millones de venezolanos en Colombia. Lo primero es regularizar a esos millones de venezolanos, que tengan los mismos derechos que tiene cualquier ciudadano colombiano”.
Advierte que <strong>“mientras no se resuelva la pobreza extrema” que es el caldo de cultivo de este conflicto con grupos paramilitares, narcotráfico y mafias que violan los derechos humamos, la migración va a seguir.
Añadió que uno de los temas del que habló el mandatario colombiano, Gustavo Petro, con su par venezolano, Nicolás Maduro, fue “la recuperación de las fronteras controladas por las mafias como objetivo común con Venezuela”.
“Por lo menos allí hay un paso que es el reconocimiento del conflicto”, enfatizó.
Insiste en que el gobierno venezolano debe asumir su responsabilidad en la búsqueda de la solución del conflicto.