La pobreza o situaciones de extrema vulnerabilidad llevan a muchos niños, niñas y adolescentes a pedir en las calles de Cumaná, capital del estado Sucre y Primogénita del Continente Americano.
Avenidas, comercios y locales de expendios de alimentos son algunos de los espacios donde a diario se ubican niños, niñas y adolescentes con edades comprendidas entre 7 y 13 años, quienes son el reflejo y la mirada fija de la desidia y supuestos bloqueos económicos que señalan líderes del gobierno nacional.
Este sector de la sociedad, resulta ser uno de los más golpeados al mantenerse en un estado de vulnerabilidad pidiendo al que transita o al que se encuentra en un expendio de alimentos, un trozo de pan o un bolívar para su familia o sencillamente para obtener alimentos o en algunos casos estos infantes son obligados a pedir para llevar a los adultos alguna moneda para satisfacer vicios o necesidades propias, valiéndose de la inocencia de los niños.
De acuerdo a una entrevista anónima a unos de estos jóvenes indicó a la corresponsalía de Qué Pasa En Venezuela en Sucre, que ellos salen a la calle todos los días para obtener algo de comer y llevar a sus hogares para alimentar a otros familiares; cuando el joven fue abordado en relación a donde se encontraban sus padres, sólo respondió que fallecieron y a cargo de él se encontraba su abuela.
Pese a lo declarado, parece ser que este es un patrón que repiten muchos de estos niños, niñas y adolescentes que se encuentran en esta situación, gran cantidad afirman que sus padres murieron, algo que enciende significativamente las alarmas de la sociedad. Donde surge la interrogante será coincidencia o es un patrón ya definido por quienes se lucran de estos actos que exponen la integridad de los más desprotegidos.
Pero bien, lo que sí es cierto es que la niñez en situación de calle se ha convertido en un problema social que, obligados a valerse por ellos mismos, sufren también los efectos de la pobreza, el hambre, y la disolución de las familias; con frecuencia son víctimas fáciles de abusos, negligencia y explotación.
En vista de la situación que esto representa, lo que podría llegar a generarse de continuar estos avances es que los denominados niños de la calle, por la necesidad de sobrevivir lleguen a verse envueltos en prostitución, consumo de drogas y diferentes formas de conducta criminal.
Espacios de atención para niños en situación de calle
Al menos en el municipio Sucre, del estado Sucre, no se encuentran albergues o casas que estén actualmente funcionando, donde estos niños puedan ser atendidos y educados; ya que la mayor parte de ellos no asiste a un centro educativo, lo que generará a la larga un grave problema de formación académica en adolescentes y adultos.
Producto de la situación económica una de las casa hogar con mayor renombre y trayectoria profesional «Casa Hogar Renaciendo en el Amor», el 19 de diciembre del año 2020 cerró sus puertas tras 20 años de trabajo ininterrumpido y atención absoluta a los niños y niñas del estado Sucre, con sede en la ciudad de Cumaná.
Este espacio que cobijaba con devoción a decenas de niños, cerró su última página en su libro de trayectoria, también siendo una de las razones expuestas por la directiva es que ellos subsistían a través de donaciones de entes privados y personas de buena voluntad en la región y otras naciones.
Se conoce que existe una casa hogar pública, en la ciudad de Cumaná, que es manejada por la gobernación del estado Sucre, pero no se maneja mayor información de la misma
Niños y niñas en condición de vulnerabilidad:
Según el organismo de las Naciones Unidas encargado de proteger los derechos de todos los niños, en todas partes, especialmente de los más desfavorecidos (UNICEF), los niños de la calle preservan normalmente algunos vínculos familiares, otros son migrantes que llegan solos a la ciudad. Con historias de vida similar como la típica huída de casa a causa de abusos del que son víctimas, es como una infinidad de infantes van formando parte de la calle creando redes con otros callejeros.
Además, Venezuela, es uno de los países donde no existe una cifra oficial de niñas, niños y adolescentes en condición de calle, así como también se tiene desconocimiento acerca del número de niños abandonados y la cantidad por estados.
Vale destacar que, esta es una de las realidades más explícitas por la que debe pasar un porcentaje de niños, niñas y adolescentes en todo el país, se han tenido que enfrentar a las calles a buscar el sustento diario para sus familias, aguantándose el hambre, sed y desprecio de algunos, además de exponerse al peligro de ser abusados y explotados sexualmente por un bocado de comida.