Minería o trading son operaciones con criptomonedas que tienen cada vez más espacio en la economía venezolana. Con cada vez más interés, los inversores toman decisiones como comprar Bitcoin o Ethereum, con la esperanza de que su dinero se revalorice.
¿Minería o trading? Y es que las historias de éxito se multiplican con el pasar del tiempo. Personas que, tras invertir en criptoactivos, compran vehículos, propiedades y bienes de lujo.
A pesar de estas historias, la inversión en criptomonedas no es una garantía de éxito. Una decisión desacertada puede conducir a pérdidas importantes. En definitiva, es una apuesta con un riesgo considerable, como toda inversión.
¿Pero de verdad operaciones como comprar Bitcoin en Venezuela es la mejor alternativa? En realidad, el mercado de criptodivisas ofrece un panorama muy amplio para invertir o ganar dinero.
Las posibilidades no están limitadas a sólo un par de criptomonedas, ni al trading tradicional. De hecho, hay actividades conexas que se han convertido en poderosas industrias, como la minería de criptoactivos.
Con tantas alternativas disponibles, surge la duda sobre cuál es la mejor opción para invertir. Para descubrirlo, la clave es tener todo el conocimiento posible antes de elegir.
En este sentido, comparar el trading tradicional y la minería de criptomonedas es un gran ejercicio para determinar qué opción ofrece mayores garantías de inversión a corto, mediano y largo plazo.
Trading: ¿Cómo comprar criptomonedas en Venezuela puede cambiar tu vida?
El trading es una actividad que consiste en generar dinero mediante la compra y venta de instrumentos financieros.
Generalmente se aplica en el mercado de valores, mediante el intercambio de acciones o bonos. Sin embargo, la actividad llegó al mercado de las criptomonedas tan pronto como su cotización empezó a subir.
La especulación es la clave del trading. Se trata de las expectativas de revalorización de un activo en el mercado, y la toma de decisiones financieras en torno a dichas expectativas.
En pocas palabras, comprar un activo a un precio bajo, pero con expectativas de que se revalorice con el pasar del tiempo y, una vez que lo haga, venderlo. De esta forma, se obtienen ganancias que permiten seguir invirtiendo.
Las criptomonedas tienen una naturaleza muy volátil. Sus precios varían vertiginosamente en cuestión de días. Por esta razón, se convirtieron en activos ideales para especular.
Especialistas en análisis bursátil han centrado su vista en el criptomercado. Hay miles de opciones para invertir y distintas estrategias según el proyecto elegido, ya que cada criptomoneda tiene sus características específicas que determinan su precio y sus expectativas de crecimiento.
Mientras que Bitcoin es una criptomoneda muy volátil que suele tener subidas o bajadas vertiginosas en cuestión de horas, Ethereum ha mantenido un poco más de consistencia con el paso del tiempo.
Por otra parte, hay proyectos que apenas nacen y al dar sus primeros pasos en el mercado, tienen un valor diminuto, que podría multiplicarse con el pasar del tiempo. Estos suelen ser los más arriesgados, ya que el proyecto podría fracasar y la valoración de la criptomoneda caería estrepitosamente.
¿Cómo empezar en el trading?
Hay muchos mecanismos para hacer trading. Hay páginas web especializadas que se encargan de gestionar las inversiones. También hay variantes en el tipo de inversión y hasta distintos mercados.
No obstante, el mecanismo frecuente consiste simplemente en la adquisición de un activo y su reventa a futuro. Por esta razón, es primordial averiguar cómo comprar criptomonedas.
El primer paso es elegir una exchange que tenga en lista la criptomoneda a comprar. Las gigantes del mercado como Bitcoin o Ethereum están disponibles prácticamente en cualquier casa de cambio de criptoactivos.
Durante los últimos años, algunas exchanges han ganado mucho espacio en Venezuela. Inicialmente, la plataforma líder era LocalBitcoins, pero ahora Binance pisa fuerte en el mercado.
Algunas exchanges nacionales como Amberes Coin, Cryptia o Cripto Lago han tenido receptividad, pero una de las más flexibles es Remitano, al disponer de una billetera fiat útil para hacer transacciones con bolívares.
Tras elegir una exchange, corresponde la apertura de una wallet para la criptomoneda que se almacene. Finalmente, la compra del criptoactivo y su resguardo en la wallet hasta el momento de venderla para obtener beneficios.
Por más simple que pueda parecer, el trading tiene mucha ciencia por detrás. Ninguna inversión implica una certeza de éxito. Sin embargo, el inversor puede incrementar sus posibilidades cuando sabe lo que hace.
Los conocimientos para predecir el comportamiento del mercado se desarrollan. Por esta razón, una capacitación en análisis bursátil o inversión en bolsa sería un complemento ideal antes de adentrarse en la especulación de criptomonedas.
Para quienes no son expertos, el trading se reduce a una apuesta a futuro. Para mejorar las expectativas de éxito, el inversor puede centrarse en aprender todo lo posible sobre la criptomoneda que adquiera, estar al tanto de las noticias y hacer un monitoreo constante de su valor.
Minería: La multimillonaria industria de las criptomonedas «gratis»
La minería de criptomonedas es una actividad que nació de la mano con Bitcoin. Fue un protocolo ideado por Satoshi Nakamoto para mantener la seguridad, inmutabilidad y confianza de la blockchain.
Bitcoin introdujo el mecanismo de consenso Proof of Work (PoW). Este sistema consiste en el uso de capacidad computacional para descifrar códigos criptográficos que sirven para verificar las transacciones de la red.
Inicialmente unos pocos entusiastas minaban Bitcoin desde sus ordenadores, pero al detectar el potencial económico detrás de la actividad, el sector creció como la espuma.
El aumento de la cantidad de mineros implicó la necesidad de acudir a más poder computacional. Por este motivo, los ordenadores perdieron su utilidad para minar.
La minería empezó a funcionar con máquinas especializadas de tipo ASIC. Quienes se adentraron de lleno en la actividad minera, instalaron enormes «granjas» con decenas de equipos conectados las 24 horas del día.
Esa es la realidad de la minería de Bitcoin actualmente. Los reyes de la industria poseen granjas con cientos de equipos conectados, consumiendo recursos eléctricos en cantidades alarmantes.
¿Eso deja la minería vetada para cualquier persona que no posea una enorme granja? No exactamente, hay muchas variantes para la minería. Entre las opciones para hacer de la minería no industrial una actividad rentable, figuran:
- Pools de Minería: Son agrupaciones de mineros con poca capacidad. Mediante una red interconectada, unen sus capacidades de cómputo con la esperanza de verificar bloques de la blockchain. Las ganancias son repartidas entre los miembros que participaron en la verificación.
- Alternativas a Bitcoin: Otras criptomonedas poseen una menor dificultad de minado. Minar Litecoin (LTC) o Ethereum (ETH) puede ser más simple, aunque Ethereum está migrando a un protocolo de consenso distinto a PoW.
- Minería con GPU: No siempre es necesario adquirir equipos ASIC para minar. La minería de algunas criptomonedas funciona con unidades de procesamiento gráfico, es decir, potentes tarjetas gráficas. Esto permite hacer el proceso desde un ordenador, siempre y cuando posea suficiente potencial de procesamiento gráfico.
¿Minar vale la pena?
En teoría, la minería permite ganar criptomonedas «gratis». Ya que son una recompensa, el minero no necesita recurrir al mercado y ejecutar operaciones como comprar Bitcoin.
Sin embargo, los equipos para minar son costosos, así que sí es necesaria una inversión. Las grandes recompensas en Bitcoin dependen de grandes laboratorios que cuestan decenas de miles de dólares, adicional al consumo eléctrico que implica una factura importante.
La minería más pequeña ofrece recompensas menos generosas, y la inversión en buenos equipos se mantiene, ya sea con un par de máquinas ASIC o con tarjetas gráficas potentes.
En este sentido, puede valer la pena en condiciones específicas. Por suerte, Venezuela posee algunas de esas condiciones, con una tarifa baja del servicio eléctrico y un marco legislativo que legaliza la actividad.
La mejor opción
Tanto minar como comprar criptomonedas en Venezuela generan ingresos. Ambas alternativas son válidas y tienen tanto pros como contras que se adaptan a la situación de cada persona.
Sin embargo, es factible hacer ambas actividades a la vez, tanto invertir en criptomonedas para trading como minar desde un ordenador.
Algunas plataformas facilitan este tipo de acciones. En el plano internacional, Binance cuenta con su propia criptomoneda, BNB. Cualquier usuario puede utilizar la plataforma para tradear mientras utiliza una pool para minar BNB.
Un caso parecido en el mercado nacional es el de Remitano. No sólo ofrece un mecanismo para el intercambio de criptomonedas, sino que también lanzaron su propia criptomoneda y puede ser minada desde la plataforma.
Sea cual sea tu elección, el mercado de criptomonedas ofrece muchas alternativas para ganar dinero. Entonces, ya sea aprender cómo comprar criptomonedas desde Venezuela para especular o cómo sacar provecho de la minería, las expectativas implican ganancias. También puedes comenzar en el mundo de las criptos minando RENEC desde tu celular y de forma gratuita.