Tal como estaba previsto, este martes 25 de junio, la líder de la oposición venezolana María Corina Machado, fue recibida en las diferentes poblaciones de la entidad merideña, a lo largo de su recorrido por Venezuela en apoyo a la candidatura presidencial de Edmundo González, llegando a el Viaducto Campo Elías, de la ciudad de Mérida, donde la esperaba una multitudinaria concentración ciudadana, a pesar de la fuerte lluvia que caía sobre la ciudad.
Pasadas las 8 de la noche, llegó la líder en medio de aplausos y algarabía, recibiendo el baño de cariño del pueblo, empapados de la esperanza de un cambio político pacifico, que lleve al país a un mejor futuro.
El mensaje de María Corina fue de esperanzas, y de la reconstrucción de un país con seguridad, derecho a la propiedad y la promesa del abrazo de bienvenida de vuelta a casa de los hijos que han salido del país en búsqueda de estabilidad económica, asi como la modernización de la universidad y donde los militares se dediquen a la defensa del país sin colores partidistas, mensajes que rápidamente conectaron con los asistentes.
Asi mismo, María Corina, reiteró a los asistentes la importancia de votar y regresar para ser testigos del acto de escrutinio durante la elección presidencial del 28 de julio, y del respeto a los resultados por quienes han hecho todo para evitar que en las urnas se demuestre que el país ya decidió por el cambio político del país.
María, además de recibir gran cantidad de detalles a lo largo de su recorrido, como los infaltables Rosarios, tortas, ramos de flores y globos; mientras que una Hermana Dominica le colgó al cuello un escapulario de la Virgen del Carmen, protectora en dificultades, junto a una bendición especial a nombre de todos merideños.
Al culminar su discurso, María Corina continuó su recorrido hasta la población de Lagunillas, donde era esperada por otra multitud de ciudadanos, quienes la recibieron al filo de la media noche, cuando llegó acompañada por una gran cantidad de motorizados, quienes mantuvieron rodeada la caravana donde viajaba “la Libertadora” sin que se presentaran inconvenientes.
El acto ratificó el compromiso de unidad de los diferentes partidos y movimientos políticos regionales y nacionales alrededor de la propuesta que representa María Corina Machado y Edmundo González.
Lo negativo
Las notas discordantes de la visita de María Corina Machado, de nuevo se debieron a las fallas de organización, el fugurismo y tarinismo que padecen algunos políticos y otros personajes, quienes aún conscientes del poco espacio, se negaron a bajarse a pesar del pedido de los moderadores locales, torpedeando el trabajo de la poca prensa regional asistente, quienes a su vez se mantuvieron en el espacio asignado para prensa, tratando, entre quejas, de lograr algunas imágenes propias para entregar su trabajo informativo.
Asi mismo, el derecho de palabra acordada por los actores políticos regionales y nacionales, dejó mucho que desear, como el del político que “no tenía discurso preparado para la ocasión” pero se adjudicó la representación de los independientes, asegurando ser el 80% de los votantes del país, y emitió descalificaciones que poco suman a la unidad, misma en la que ha buscado insistentemente un lugar, dejando tarea de análisis a los asistentes.
De los discursos se pueden destacar los de Alexis José Pararoni, Guido Mercado y Arquímedes Fajardo, quienes motivaron la participación en la elección del 28 de julio, el apoyo en los centros de votación a la hora de los escrutinios y el trabajo mancomunado para la reconstrucción del país.
Y para colmo
El colmo del figurismo, ocurrió al ser anunciada la participación del Caballero de la Democracia Venezolana, Héctor Alonso López, siendo abruptamente interrumpido por un señor quien, a la llanera y con sombrero incluido, desconociendo la idiosincrasia merideña y normas de cortesía, se apoderó del micrófono, despreciando también a los moderadores locales e ignorando a las pautas de la organización. Ante la desagradable situación, los representantes locales dictaron catedra de compostura y buena educación propia de ciudadanos merideños.