Nicolás Maduro. Foto: Cortesía
Una vez más, Nicolás Maduro aprovechó la conmemoración del bicentenario de la Batalla de Carabobo, donde se fraguó la Independencia venezolana, para adjudicarse la gloria alcanzada por Simón Bolívar y otros próceres patrios mientras intenta hacer olvidar la debacle que ha causado el chavismo en solo dos décadas.
lapatilla.com
“200 años después y aquí estamos pueblo unido y victorioso, de pie y orgulloso de su historia”, expresó Maduro ante las cámaras de la televisora estatal este martes 22 de junio durante la inauguración de obras conmemorativas construidas y restauradas en el estado Carabobo.
Maduro, como siempre lo ha hecho la cúpula del Palacio de Miraflores en los últimos veinte años, pretendió enlodar la imagen del Libertador con la del fallecido expresidente Hugo Chávez. “Fue el Comandante Chávez el que trajo a Bolívar a marchar al lado del pueblo venezolano”, comentó.
Al enarbolar otro arranque de chovinismo vacío, Maduro se atrevió a mencionar las traiciones que sufrió Bolívar tras sellar la emancipación de los venezolanos, un proyecto moral que el chavismo también ha burlado al ponerse a las órdenes de potencias extranjeras como Rusia y China.
Por si fuera poco, Maduro volvió a mencionar la eterna promesa incumplida del crecimiento económico: “A partir de estos 200 años vamos abrirle las puertas a una nueva era de unión, amor, trabajo, prosperidad y crecimiento”.