“Es al régimen el que le conviene la destrucción del patrimonio arquitectónico venezolano, porque equivale a la destrucción de nuestra memoria histórica”, sentenció el diputado Luis Barragán al destacar el deterioro del centro histórico de Caracas y, específicamente, el de los alrededores de la Asamblea Nacional.
En anteriores oportunidades, el parlamentario de Vente Venezuela denunció que el viejo bulevard comprendido entre las esquinas de San Francisco y Las Monjas, hacia el lado este del Palacio Federal Legislativo, “no sólo se ha convertido en un estacionamiento exclusivo para la burocracia oficial en este siglo, sino que no existe el tránsito peatonal hacia un espacio que antes fue propicio para la libre protesta ciudadana ante el parlamento”.
“Ahora – agregó – se suma el deterioro del lado oeste, sometido a un vandalismo que no combate la unidad militar que se encuentra en el palacio, la cual sólo ha actuado para impedir el acceso de los legítimos representantes del pueblo venezolano a su sede natural”.
Barragán, integrante de la Fracción Parlamentaria 16 de Julio, ejemplificó su denuncia con el derribamiento de un farol que, por lo menos, data de la remodelación de mediados de los años setenta del siglo XX, si no es una de las piezas originales.
“No creemos que el instante en el que fue derribado el poste y su farol pudo tan fácilmente pasar por desapercibido, desconociendo cuánto tiempo ha pasado la pieza destartalada en el piso, un dato al que, por lo visto, son tan indiferentes las autoridades policiales. En última instancia, tratan de borrar de la memoria colectiva que alguna vez hubo un parlamento libérrimo en Venezuela”.
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