El presidente Jovenel Moïse recibió doce impactos de bala durante el asalto a su vivienda privada en Puerto Príncipe, en horas de la madrugada del miércoles, donde también resultó herida su esposa Martine Moïse, quien se encuentra siendo atendida en un centro de salud en la ciudad de Miami, Estados Unidos.
En entrevista para el diario “Le Nouvelliste”, el juez Carl Henry Destin, juez de paz encargado del informe forense, detalló que el cadáver del mandatario tenía doce oficios realizados con armas de gran calibre y proyectiles de 9 milímetros.
“La oficina y el dormitorio fueron saqueados. Lo encontramos (Jovenel Moïse) acostado boca arriba, pantalón azul, camisa blanca manchada de sangre, boca abierta, ojo izquierdo perforado. Vimos un impacto de bala a nivel de su frente, uno en cada pezón, tres en la cadera, uno en el abdomen”, indicó el magistrado.
Detalló que la única persona que resultó herida durante el ataque fue la primera dama Martine, mientras que su hija, Jomarlie Jovenel Moïse, quien se encontraba en la misma residencia, consiguió esconderse en la habitación de su hermano, quien también resultó ileso.
Por su parte, la mujer de servicios y el guardia de seguridad fueron amordazados por los delincuentes cuando ingresaron a la propiedad, dijo el juez, citando testigos.
“Se encontraron muchos casquillos de cartuchos de 5.56 y 7.62 milímetros entre la puerta de entrada y el interior de la residencia”, sentenció.
El asesinado del presidente Jovenel Moïse se produce en medio de una creciente crisis política y económica que ha generado en los últimos meses el aumento de la violencia, causando el descontento de más de 11 millones de habitantes.
Moïse, de 53 años, llevaba más de dos años gobernando por decreto después de que el país no celebrara unas elecciones previstas, lo que llevó a disolver el Parlamento, refirió AP.
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