La Morgue Judicial de Ancón, que sirve a la capital de Panamá y el área Metropolitana, “está a su máxima capacidad” ante el incremento de los crímenes, dijo su administración este viernes, cuando se registraron al menos dos sucesos que dejaron 8 muertos.
“Debido al aumento de la criminalidad la Morgue Judicial de Ancón está a su máxima capacidad. Pese a los recientes recortes presupuestarios, se siguen brindando los servicios periciales bajo estándares científicos y acorde a las normativas legales vigentes”, escribió el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses (IMELCF) en su cuenta de Twitter.
La Morgue Judicial de Ancón tiene capacidad para 45 cadáveres, 21 en sala de recepción y 24 en sótano, y atiende al área Metropolitana, que incluye a la capital y zonas aledañas, dijo a Efe una fuente del IMELCF.
Este viernes, 5 personas resultaron muertas en un tiroteo en un ataque armado dentro de una discoteca en la capital, en un hecho inédito, que las autoridades atribuyeron a una “guerra de pandillas”.
También fueron hallados los cuerpos de tres personas, maniatadas y presuntamente ejecutadas, en una carretera de las afueras de la capital. Las autoridades, en un primer momento, descartaron que este hecho esté vinculado al ataque en la discoteca.
“En ambos casos, los médicos forenses practicarán las necropsias de rigor”, dijo el IMELCF en su cuenta de Twitter.
Estos hechos ocurrieron en medio de un aumento de los homicidios en Panamá, que hasta septiembre pasado sumaron 410, con 26 más que en el mismo período de 2020, según cifras de la Fiscalía.
La gestión de la seguridad pública en Panamá está siendo duramente cuestionada por las constantes noticias sobre robos y asaltos, así como por el asesinato de pandilleros y narcotraficantes a cualquier hora y en cualquier lugar, casos que las autoridades atribuyen al ajuste de cuentas entre criminales.
Las autoridades trabajan coordinadamente “para desarticular a estos grupos criminales”, afirmó este viernes el Fiscal Superior de Homicidio y Femicidio de la Fiscalía Metropolitana, Rafael Baloyes.
EFE