El estudio de un analista que consultó a más de 100 dirigentes y funcionarios describe las batallas dentro del régimen: “El enfrentamiento en el PSUV ha llegado a dimensiones inesperadas”, asegura
“La fractura y la pugna entre las distintas corrientes, Maduro-Diosdado, no es un hecho novedoso, han existido desde hace muchos años, encontrando siempre brechas para coexistir en torno al liderazgo hoy inexistente de Hugo Chávez”, asegura el dirigente político y exdiputado Juan Francisco García Escalona en un estudio sobre lo que ocurre internamente en el partido de Gobierno, que llegó a conocer muy bien porque convivió en las entrañas del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
Por Sebastiana Barráez | Infobae
Asevera que hay una pugna interna “en dos extremos de fuerza, contradictorios en sí mismos, representados en: Nicolás Maduro Moros y Diosdado Cabello Rondón. Hay algunas variantes manifestadas en las regiones, donde se confrontan incluso a lo interno de las propias corrientes, denotando una gran división en el partido que se extiende hasta el gabinete y hasta lo más elevado del régimen”.
“Hay una gran división en el partido que se extiende hasta el gabinete y hasta lo más elevado del régimen”
A juicio de García, quien es abogado con maestría en Ciencias Jurídicas, la escena política actual, se caracteriza por una marcada beligerancia, llena de intensas confrontaciones de tipo personal, donde no hay deliberaciones en cuanto a la propuesta de ideas y de programas.“El debate conceptual quedó anulado por riñas de tipo personal, de ambiciones desmedidas de una corriente sobre la otra, con entrañable espíritu de supervivencia”.
Para este análisis dice García Escalona, él consultó a 3 exgobernadores, 6 candidatos a gobernadores, 3 ex ministros de Hugo Chávez, 4 ex asesores de la presidencia, 14 exdiputados de la Asamblea Nacional, 16 alcaldes en ejercicio aspirantes a reelección, 32 aspirantes alcalde, 9 legisladores regionales aspirantes a reelección, 11 ex legisladores regionales, 3 ex viceministros de la gestión de Hugo Chávez y 9 funcionarios de la administración pública.
Destaca que “la dinámica de las elecciones primarias ha significado, para algunos, una emboscada maestra que compromete severamente los intereses de una de las dos corrientes en disputa, provocando la reflexión acerca del deterioro de la comunión entre los factores de poder que convergen en el partido político del régimen, de manera que se extingue el amor que los mantenía unidos”.
“Situación que expone abiertamente el abismo, entre los abrazos conferidos y la cruda rivalidad contenida en cascadas de amenazas, en el tránsito de la lucha por el poder, constituyendo así el quiebre histórico, y resaltando la irreconciliable fractura”.
“El PSUV se fue degradando, convirtiéndose en una herramienta para el castigo y la exclusión de quienes se atrevían a desafiar el poder”
En el análisis que hace, llega a la conclusión de que el PSUV “se fue degradando, convirtiéndose en una herramienta para el castigo y la exclusión de quienes se atrevían a desafiar el poder de los gobernadores y alcaldes, quienes actuaron como dueños de la organización, obstaculizando los debates, concentrando las decisiones, enrostrándose ante sus militantes como seres supremos envestidos de autoridad con carácter totalitario, fragmentando una organización que nació con argumentos de garantizar la participación activa y protagónica del pueblo”.
Es así como el PSUV ha terminado convertida “en un elemento antipolítico y antidemocrático, un partido que se ha degenerado de tal manera, que es un brazo férreo de las exclusiones y las discriminaciones de los derechos del pueblo venezolano”.
“El enfrentamiento en el PSUV ha llegado a dimensiones inesperadas, quizás haya sido un terrible error convocar elecciones primarias. Los tiempos del liderazgo de Hugo Chávez han terminado, no hay control real por parte de ningún dirigente. Las molestias se expresan libremente, al punto de llevarlas al plano personal”.
Fuertes críticas por la escogencia de candidatos en el PSUV
Dice el dirigente Juan García que “algunos candidatos se mantienen inquebrantables en su línea de apoyo, otros no saben qué hacer, algunos sienten presión agigantada por el compromiso que pudieran asumir en un país convulsionado por la crisis política, económica y social, con un régimen señalado por violaciones sistemáticas de los Derechos Humanos de su población; se enfrentan a la posibilidad de despertar un día hechos unos monstruos indeseables”.
Los escenarios
García Escalona determina que las disputas por el poder en las distintas regiones, de cara al 8 de agosto, en las elecciones primarias del PSUV, se manifiestan de la siguiente manera:
Amazonas: El actual gobernador y primero del chavismo en la entidad, Miguel Ángel Rodríguez, es cercano a Nicolás Maduro, quien lo mantuvo en su gabinete en diferentes cargos. Aspira la reelección, siendo adversado por la actual ministra de los pueblos indígenas, Yamileth Mirabal, y el joven Jefferson Camejo, presidente de Fundacite candidato con el respaldo del gobernador de Miranda Héctor Rodríguez; en teoría, todos de la corriente presidencial.
Nueva Esparta: La incapacidad de Dante Rivas de dirigir el PSUV en el estado provocó el resurgimiento del exministro de la Defensa, Carlos Mata Figueroa, quien tendría el apoyo de Diosdado y el respeto de Nicolás Maduro, dándole un matiz de tranquilidad a la contienda que en otras regiones se radicaliza con el paso de los días.
Cojedes: Margaud Godoy aspira ser reelecta; heredó la gobernación a la salida de Erika Farías, y responde a la línea de Nicolás Maduro, es adversada a lo interno de esa corriente por el actual viceministro de educación Jorge Pérez, y por el alcalde de Tinaquillo, militar retirado Luis Yoyotte, quien responde a los intereses de Cabello.
Anzoátegui: El cuestionado protector de ese estado Luis José Marcano, sería el abanderado de Maduro, encontrando adversarios marcados, en las candidaturas de; Herminia García Ron, alcaldesa de Puerto la Cruz, y Dinorah Requena del Consejo Legislativo, quienes se cruzan el respaldo de dirigentes nacionales adversos al Madurismo.
Delta Amacuro: La actual gobernadora Lizeta Hernández, cierra cada acto argumentando que cuenta con Nicolás Maduro y Cilia Flores; se enfrenta a Carlos Gómez, varias veces diputado por esa entidad quien goza del respaldo de la gobernadora de Monagas Yelitze y de Diosdado Cabello.
Apure: Aspira a reelegirse un abanderado incuestionable de Diosdado Cabello, el coronel Ramón Carrizalez, considerado el rostro de la miseria y la desesperanza en la región; tiene en contra a 3 de los 7 alcaldes de la entidad, 3 exalcaldes y a todos los legisladores regionales, quienes respaldan a Pedro Danilo Leal, alcalde del municipio Pedro Camejo; cuestionado por una gestión de 16 años en la alcaldía, ahora con el apoyo del Mayor General Jesús Suárez Chourio y de Nicolás Maduro, aspira ser el nuevo gobernador.
Distrito Capital: En la capital el enfrentamiento se concentra entre Jacqueline Farías, quien se aprecia cercana a Cabello, contra la Almirante Carmen Meléndez quien tiene la bendición plena de Nicolás Maduro.
Aragua: el general Rodolfo Marco Torres cuenta con el respaldo de Maduro, mientras que, por la corriente de Cabello, emerge Karina Carpio de Motta, esposa del Mayor General Luis Motta Domínguez; como otras opciones, que ahondan la división, están aspirando Rosa León, Roy Daza y Ricardo Molina, este último también reclama respaldo de Cabello.
Sucre: El gobernador Edwin Rojas, fue también excluido del proceso, por no superar el porcentaje de postulaciones establecidas en el reglamento. Llegó al cargo si méritos suficientes, pero con apoyo de Tareck el Aissami, Nicolás Maduro estaría apoyando a Nircia Villegas, contra uno de los hombres incondicionales de Diosdado Cabello, el Almirante Gilberto Pinto Blanco, excomandante General de la Armada, exministro para el desarrollo minero, entre otros cargos importantes del gabinete.
El Almirante Gilberto Pinto Blanco
El #Almirante y exministro del #régimen, Gilberto Pinto Blanco estrena su cuenta Tik Tok, para esta payasada. pic.twitter.com/680QptTdo2
— Venezuelaesnoticia (@Venezuelaesnot1) October 7, 2020
Falcón: Aunque el enfrentamiento más evidente es entre el actual gobernador Víctor Clark Boscán, línea dura de Cilia Flores, frente a Andrés Eloy Méndez, quien goza del respaldo absoluto de Cabello, ambos parecen perseguidos por la candidatura del Almirante en Jefe Diego Molero, ex ministro de la Defensa de Hugo Chávez, quien de manera abierta en su twiter le ha respondido a Cabello: “con amenazas no se debe hacer campaña”.
Barinas: En esta entidad resurge la enemistad en la familia de Hugo Chávez. Regresa a la escena el enfrentamiento entre los hermanos Adán y el actual gobernador Argenis, quien aspira a la reelección, teniendo como rival a su sobrino Hugo Chávez, hijo de Adelis.
Guárico: José Vásquez actual gobernador aspira ser reelecto, a pesar del rechazo a su gestión, cuenta con el indeclinable apoyo de Diosdado Cabello; su máximo contendor es un empresario de profundo arraigo en el Guárico, dueño de la hacienda Las Maravillas, y de alimentos Doña Goya, se trata de José Leopoldo Matos, quien cuenta con el respaldo presidencial. También tiene cierto apoyo el rector de la Universidad Rómulo Gallegos, José Luis Berroterán.
Bolívar: El General Justo Noguera Pietri aspira la relección, con apoyo de los generales Néstor Reverol y Benavides Torres, así como de Tareck el Aissami; para ello han sumado al exalcalde de Caroní, José Ramón López, quien estuvo privado de libertad; contrario a ellos, con el respaldo de Diosdado, está el candidato Tito Oviedo, exparlamentario y actual alcalde de Caroní.
Lara: Adolfo Pereira sin discusiones es el abanderado de Nicolás Maduro por intermediaciones de Carmen Meléndez, teniendo un fuerte adversario en los Reyes, asumidos en la corriente de Diosdado Cabello. Apoyan a Pedro Alastre del 4F, quien ha dado declaraciones controvertidas contra los demás candidatos y anuncia que; ‘seré un presidente en Lara, veo a Maduro cansado, para el 2024 habrá que elegir un nuevo presidente’. Parece tener la determinación de hacer la antesala de la candidatura de Diosdado Cabello. En este estado también aspira Julio Chávez, quien se pliega a ambas corrientes a su conveniencia.
Carabobo: El polémico Rafael Lacava, con cierto respaldo del Madurismo, se enfrenta al capitán José Vielma Mora, con el respaldo de Diosdado y Ameliach; el enfrentamiento en este estado se torna muy complejo, planteándose como alternativa al conflicto la aspiración de Saúl Ortega.
Mérida: Se sostiene el enfrentamiento entre Jheyson Guzmán, candidato con el apoyo de Tareck el Aissami y Héctor Rodríguez afectos a Maduro, contra Ramón Lobo, exministro de finanzas, apoyado por Diosdado Cabello.
La Guaira: La viuda del general Jorge García Carneiro, María Vega, se ha hecho del apoyo de la mayoría del ala de Cabello; esta gobernación he generado grandes debates por las aspiraciones de Nicolás Maduro Guerra, que aunque no es candidato, podría estar apoyando a un candidato gestado de la mano de Héctor Rodríguez: José Alejandro Terán, actual alcalde. También aparece en la competencia la ex presidente del Consejo Nacional Electoral, IndiraAlfonzo.
Miranda: Héctor Rodríguez, uno de los alfiles centrales de Maduro y los hermanos Rodríguez, contra Claudio Farías, un incondicional a Diosdado Cabello. Por otra parte, aparece Aurora Morales, con el respaldo de Elías Jaua, quien ha denunciado ser excluido del proceso. Otro que aspira es Rodolfo Sanz, tratando de ser una opción dentro del letal enfrentamiento.
Yaracuy: Julio León Heredia, aspira una vez más la reelección con el respaldo de Diosdado Cabello, pero tendrá que vencer a Ricardo Capella, con orígenes en el Partido Comunista, fue alcalde de Nirgua y viene de ser parte cónsul de Barcelona, España.
Monagas: Yelitze Santaella, ha tenido el respaldo histórico de Diosdado Cabello; ahora es desafiada por la empresaria a quien llaman la reina del cacao Leudys González, quien tendría el apoyo de Nicolás Maduro, y sectores importantes de la Fuerza Armada.
Sucre: El gobernador Edwin Rojas, fue también excluido del proceso, por no superar el porcentaje de postulaciones establecidas en el reglamento. Llegó al cargo si méritos suficientes, pero con apoyo de Tareck el Aissami, Nicolás Maduro estaría apoyando a Nircia Villegas, contra uno de los hombres incondicionales de Diosdado Cabello, el Almirante Gilberto Pinto Blanco, excomandante General de la Armada, exministro para el desarrollo minero, entre otros cargos importantes del gabinete.
Portuguesa: Decidieron prescindir del actual gobernador Rafael Calles, quien junto a Wilmar Castro ahora respalda la candidatura del Contraalmirante Reinaldo Castañeda, quien tiene un récord de industrias quebradas y destrozadas. En su contra aparece el actual alcalde de Araure, Primitivo Cedeño, con el respaldo de Francisco Torrealba, todos aparentemente en la corriente de Nicolás Maduro.
Táchira: Una de las mayores disputas se centra en este estado, entre Freddy Bernal, hombre de Diosdado Cabello, contra Leonardo Salcedo quien es un histórico miembro de la “revolución”, y representa la línea de Maduro y Cilia Flores, además de tener el apoyo frontal de Iris Varela.
Zulia: Omar Prieto a pesar de contar con varios detractores en el alto gobierno, se alzó con la posibilidad de la reelección y el apoyo de Nicolás Maduro, logrando excluir al exgobernador Arias Cárdenas y al exalcalde Gian Carlo Di Martino, quienes se han unido en torno al alcalde de Mara, Luis Caldera, con el apoyo de Diosdado para intentar derrotar a Prieto.
Trujillo: Excluido Henry Rangel Silva de la reelección, hombre de Diosdado Cabello, se aspira que su respaldo sea para Luz Castillo, alcaldesa de Trujillo; en su contra se miden el exgobernador Hugo Cabezas y Hugbel Roa, ambos hombres de Tareck el Aissami, por lo que diríamos que responde a la línea de Maduro.
Concluye diciendo Juan García que “la escasa militancia se moverá en el Psuv con la esperanza de aniquilar a sus verdugos en los estados, mientras los candidatos están enfrentados en una guerra mortal; de ahí en adelante será imposible reconstruir las relaciones, porque en su mayoría ostentan poder económico, los mueve e impulsa la lucha por el poder político y de allí la determinación de llevar el enfrentamiento a niveles máximos. Los menos contaminados están inundados de profundadas dudas de cómo comportarse de ahora en adelante si son favorecidos con los cargos que aspiran”.