Las fuerzas del orden italianas han asestado un duro golpe a la familia de Salvatore “Totó” Riina, el fallecido jefe de “Cosa Nostra”, la mafia sicialiana, al requisar bienes por valor de más de 4 millones de euros al hermano y el sobrino del histórico “capo” mafioso, así como a otros dos sospechosos, informaron hoy los carabineros de Palermo (sur de Italia).
La brigada especial de los carabineros (ROS) ejecutó tres resoluciones judiciales tras un largo proceso de investigación que pemirió asegurar al Estado los patrimonios ilícitos de los Riina desde la época de “Totó”, fallecido en 2017, así como de dos familiares de Calogero Lo Bue, hombre cercano a otro de los más sanguinarios jefes mafiosos, Bernando Provenzano.
“La confiscación de viviendas, cuentas corrientes, libretas de ahorro, tierras y bienes de la empresa afecta a sujetos ya gravados por numerosos antecedentes penales y vínculos con la mafia”, indicaron en un comunicado los carabineros sobre los cuatros individuos a los que se les han requisado los bienes, al destacar en particular “el papel históricamente activo” de uno de ellos, Rosario Salvatore Lo Bue.
Lo Bue era un “hombre de honor” y a lo largo de los años estuvo en contacto con destacados exponentes del clan de los corleoneses, mientras que el sobrino de “Totó”Riinaa había sido condenado por extorsión con métodos mafiosos, como parte de una investigación más amplia que había arrojado luz sobre la red de apoyo de Provenzano y la reorganización de la asociación después de la captura del jefe en 2006 en Corleone.
Durante la década de los 80 y principios de los 90, Riina y su familia mafiosa, los corleoneses, desarrollaron una despiadada campaña de violencia tanto contra los clanes rivales como contra el Estado, que culminó con el asesinato en 1992 de los jueces antimafia Giovanni Falcone y Paolo Borsellino.
Detenido poco después, Riina fue condenado a varias cadenas perpetuas por más de cien asesinatos y murió de cáncer en prisión en 2017 .
EFE