El Seniat no permite a la Universidad de Carabobo renovar su registro de información fiscal (RIF) porque está insolvente. La razón: el Ejecutivo Nacional, a través de la plataforma Patria, no envía al alma máter carabobeña lo correspondiente al pago de impuestos, entre otros conceptos.
Así lo alertó el vicerrector administrativo de la UC, José Ángel Ferreira, quien informó que la más importante casa de estudios superiores del centro del país introdujo un reclamo ante la Oficina Regional del Seniat al respecto. “Si el Seniat suspende el RIF de la UC por falta de pago, no solo generará problemas administrativos sino también afectará aspectos académicos de nuestros
estudiantes y profesores”.
Agrega Ferreira que, adicionalmente, el Ejecutivo no ha hecho llegar a las respectivas direcciones de administración lo que tradicionalmente se le descuenta al trabajador por concepto de seguro social, cajas de ahorro, préstamos, pensiones alimentarias, fondos de pensiones y jubilaciones, instituciones de salud y asociaciones gremiales entre otros.
El profesor José Ángel Ferreira nuevamente se dirigió a la opinión pública a fin de exigir, con la mayor premura posible, la puesta al día de los descuentos por retenciones que ha efectuado la plataforma Patria que no se han honrado en el último año, trayendo como consecuencia un desequilibrio en todos estos organismos y la insolvencia de los trabajadores universitarios, que, habiéndoles sido descontado de su salario esos conceptos, se encuentran morosos.
“Pese a que en todos los casos se efectuó el descuento salarial y por ende la contribución del trabajador, si alguien quiere liberar un inmueble que fue financiado por el Fondo de Ahorro Obligatorio para la Vivienda (Banavih), se va a encontrar con que está insolvente y no lo podrá hacer, al igual que si alguien desea pensionarse por el Seguro Social dado que acumuló los requisitos exigidos de tiempo, o lo referente al pago de pensiones alimentarias a un hijo menor de edad, donde igualmente aparecerá insolvente”.
Recordó que también existe una situación muy difícil en cuanto al funcionamiento de las cajas de ahorro y los fondos de pensiones, porque además no haber recibido las retenciones tampoco se han pagado los aportes correspondientes, lo que genera consecuencias en la operatividad de estos organismos.
“Ni hablar de los organismos gremiales que también se encuentran en una situación muy difícil y comprometida, como en el caso de los docentes en la parte de la salud. Todo esto sin mencionar los aportes patronales, los cuales tampoco han sido honrados en ese lapso; pero lo más grave es la retención, la cual se sacó del bolsillo de los trabajadores y no se ha honrado, siendo a todas luces una eventual apropiación indebida”.
Ferreira manifestó que se trata de una situación nacional que, en el caso de la Universidad de Carabobo, se expresa en una deuda del Ejecutivo Nacional que supera el millón de dólares, y que en todo el país debe estar cerca de los 100 millones de dólares. “Resulta un escenario difícil de manejar y que da cabida a especulaciones, entre ellas, al hecho de que con ese dinero se estaría financiando parte del gasto público, lo cual va en contra de los derechos laborales y humanos de las distintas comunidades universitarias, y en general, de toda la administración pública”.
Aseguró la autoridad universitaria que “esta situación ya es insostenible y podría ser irreversible, dado el proceso de devaluación que afecta la moneda, además de la reputación de quienes han venido contribuyendo y están insolventes en estos momentos con todos esos organismos”.
“Es un proceso que configura una lesión de rango humanitario, que debe ser atendido lo más pronto posible y es consecuencia de la implementación de la plataforma Patria, uno de los mayores infortunios que ha atacado fulminantemente el sistema de nómina de toda la administración pública y en particular de todos los universitarios”, dijo el vicerrector.
Como si lo anterior fuera poco, “a la Universidad de Carabobo le fue arrebatada su autonomía organizativa en muchos aspectos, porque decisiones rutinarias como por ejemplo las vacaciones del personal que por su naturaleza debe tener vacaciones individuales en lugar de colectivas, no fueron aplicadas este año dado que el bono se pagó en una sola ocasión, lo que trae problemas graves para servicios de bomberos, salud, vigilancia, radio universitaria y guardias de la Dirección de Informática.
Todo ello entorpece la rutina diaria de manera alarmante, en virtud de que las cosas más sencillas del día a día no pueden hacerse.
Una muestra de ello es que pesar de haberse homologado la IV Convención Colectiva Única, el Ministerio de Educación Universitaria no permite cargar ficheros de nómina con dichos montos, y automáticamente exige presentar formularios con
montos del instructivo elaborado por Onapre».
José Ángel Ferreira resumió la situación señalando que “la Plataforma Patria sigue siendo la peor tragedia que le ha pasado a los universitarios”.