Insistió a los electores en no quedarse en casa el próximo domingo 21 de noviembre y que transformen su inconformidad con el régimen en votos para el cambio.
El candidato por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) a la Alcaldía de Caroní, Francisco Sucre, ha contado con el respaldo de los habitantes de las parroquias que conforman Ciudad Guayana, durante los recorridos realizados a lo largo de la campaña electoral.
Como un rayo de esperanza para comenzar la recuperación de Ciudad Guayana y la institucionalidad de la Alcaldía de Caroní, los guayaneses han aceptado la propuesta de Sucre, comprometiéndose a transformar la aceptación en votos el próximo domingo 21 de noviembre.
“Nosotros vamos a recuperar y mejorar la institucionalidad de la Alcaldía, que solo ha servido en los últimos años para propaganda del Psuv, vamos a mejorar los servicios básicos, la recolección de basura, el transporte público, todo eso con servidores públicos cumpliendo con su trabajo y no a las órdenes partidistas del régimen”, señaló.
A diferencia de los candidatos del régimen, quienes utilizan recurso públicos para hacer campaña política, Sucre ha estado en constante contacto con la gente, palpando las carencias de cada comunidad, de cada calle de Puerto Ordaz, escuchando las exigencias y propuestas de los guayaneses.
Desde Core 8, Villa Bahía, Unare, Caura, Ventuari, Villa Africana, Los Olivos, Castillito, Brisas del Paraiso, Chirica Vieja, Las Américas, Manoa, Inés Romero, Brisas del Orinoco, Los Monos, la Urbanización Orinoco hasta Puerto Libre se evidencia el rechazo para quienes han hundido a Guayana en la mediocridad y el abandono.
En este sentido, el candidato de la Unidad insistió a los electores a convertir ese descontento en votos para el cambio.
“Yo cuento con ustedes para que desde el 21 de noviembre empiece el cambio que queremos para nuestra ciudad, los ciudadanos de Guayana serán visibilizados, escuchados y valorados. Vamos a construir una Guayana para todos” lanzó.
Además recordó que estas elecciones es el primer paso para la recuperación de la presidencia de la República y los poderes públicos, cuando en los próximos meses el Poder Electoral llame a elecciones presidenciales.