Especial desde Berlín
Para: Qué pasa en Venezuela
Martha Escalona Zerpa
Antes de abordar el tema de la tan esperada y premiada película Nomadland es imposible no ensalzar las virtudes de la mujer y actriz Frances McDormand, porque ante todo ella es lo opuesto a una diva clásica de Hollywood. Casi ninguna otra actriz es tan convincente en sus interpretaciones como ella, quien ha sido ganadora, entre otros galardones, de tres Oscar de la Academia de Cine.
Cuando subió al escenario para recibirlos fue muy commovedor. Hace tres años, cuando recibió el Premio de la Academia por su actuación en «Tres vallas publicitarias en las afueras de Ebbing, Missouri», simplemente dejó la estatuilla dorada en el suelo y pidió a todas las mujeres nominadas que se levantaran de sus asientos para visibilizar la creatividad femenina en la sala.
Este año fue honrada dos veces como actriz principal y coproductora de Nomadland y terminó su discurso con un aullido de lobo. En tales apariciones públicas, nunca oculta su entusiasmo y su lucha por sus proyectos cinematográficos. Y a diferencia de otras actrices ganadoras de los Oscars sus palabras van más allá de las meras expresiones de agradecimiento.
Este comportamiento llano y poco afectado, al igual que sus interpretaciones de mujeres de la clase trabajadora, sin ningún poder, ni dinero, la hacen ser una persona con la cual cualquiera puede identificarse y vibrar emocionalmente. Esas cualidades interpretativas son inestimables. Frente a la cámara ella se involucra por igual con las fortalezas y debilidades de sus personajes. Sin poses dramáticas, sus personajes siempre transmiten una sinceridad emocional contagiosa.
Esto se aplica a la mujer policía embarazada en Fargo (1996), que resuelve horribles asesinatos en la provincia nevada. Pero también como empleada de un gimnasio, que en Burn After Reading (2008) no quiere más que un par de implantes mamarios. Al igual que en sus otros roles.
McDormand, que nació en 1957 en chicago, adoptada por una enfermera y un pastor, es una actriz que no necesita elocuentes monólogos para transmitir el estado de ánimo de sus personajes. Por lo general, hay mucho más escrito en su rostro que en las lineas del guión. A menudo hay algo excéntrico en sus personajes, especialmente en los roles que ha interpretado una y otra vez bajo la dirección de su esposo Joel Coen.
En especial en Nomadland, de la directora china Cloé Zhao, McDormand arroja todo lo voluminoso por la borda y literalmente se fusiona con el medio social de las personas que tuvieron que hacer de la casa móvil su hogar después de la crisis bancaria de 2008.
Rodeado de laicos que viven en este mundo y que se interpretan a si mismos, McDormand adopta el rol a la perfección, haciéndose una más entre ellos. La película se mueve en la frontera entre documentación y ficción, y estudia tantos sus diversos protagonistas reales como el entorno donde se encuentran.
Y así comienza la vida de McDormand como nómada: Cuando la fábrica de yeso tuvo que cerrar después de 81 años a raíz de la crisis económica, el pueblo de Empire en el estado de Nevada se transformó en una ciudad fantasma. La fábrica era el único empleador de la zona. Su marido que trabajaba allí tambien quedó desempleado y luego después de larga enfermedad murió.
Fern, que asi se llama Frances McDormand en Nomadland, se quedó sin ninguna seguridad social, sin dinero y sin casa. Ahora y con 60 años todas sus pertenencias están amontonadas en un garaje. Sólo lo esencial va con ella. Hay poco espacio en la Ford Econoline que Fern ha convertido en una casa rodante. Saca de una caja la chaqueta de trabajo de su difunto esposo. Lo huele por última vez y cierra la puerta del garaje. La vida que ha llevado durante los últimos 40 años es ahora sólo un recuerdo. Y así hace de la autocaravana y de la carretera su hogar. Su ruta es donde hay trabajo.
La búsqueda de empleo se extiende por todo el oeste de Estados Unidos: cosecha de remolacha azucarera en Nebraska, fregado de inodoros en un campamento en Badlands, asando hamburguesas en un parque de diversiones en Dakota del Sur o en un enorme centro de envío de Amazon para el negocio navideño, con lugar de estacionamiento incluido para trabajadores temporales.
Por las noches regresa a su casa rodante, a la que cariñosamente llama Vanguard, prepara una lata de sopa en la estufa y se mete en su saco de dormir. Las noches suelen ser frías, pero Fern aguanta. Es una nómada orgullosa que ha aceptado vivir sin mayor seguridad económica y sin autocompasión. Asi también tiene que lidiar con los comentarios despectivos y compasivos de su familia y amigos, las duras condiciones para los trabajadores de temporada o las gélidas temperaturas en invierno.
Pero ella no está sola. A través de su colega de trabajo Linda (Linda May) se le presenta a la comunidad de las «personas sin hogar». El gurú en Arizona de Youtube, Bob Wells, no solo ofrece consejos prácticos para la vida en la calle en sus videos, sino que también organiza reuniones periódicas para las personas que han hecho de la autocaravana su hogar. Una amplia variedad de historias de vida se juntan alrededor de la fogata. Muchos han perdido sus hogares e ingresos como resultado de la crisis. Otros querían dejar atrás la agitada vida en el empleo permanente o las relaciones familiares rotas y oponerse a la sociedad de consumo estadounidense con su sueño de libertad.
Como se ve en Nomadland el nomadismo está representado por personas que tienen diferentes motivos para vivir on the road. Aunque el aspecto económico sea una de las razones más importantes, no explica todas las biografías. Es también una forma de vida, sobretodo para aquellos que han optado libremente por vivir de esa manera, más conectados con la naturaleza y lejos del consumo de bienes. Para unos es la realización de un sueño y el anhelo de libertad, para otros es una pesadilla, de la cual no tienen salida.
!Y cuán apropiado es el nombre de su rol en alemán «Fern»! Porque Fern anhela la distancia. Aún teniendo la oportunidad de entablar una relación con un hombre y vivir con él y su familia en una casa muy burguesa, recoge sus pertenencias en una clara mañana y se marcha.
Fern retoma su libertad y su autonomía. Retoma su camino incierto en su Vanguard. Su casa rodante guardiana.