El virus de la COVID-19 se ha ido acumulando en mutaciones debido a su reproducción rápida, las cuales son divididas en linajes, y algunas de ellas se denominan variantes porque tienen ciertas mutaciones que pueden conferir
cambios; la misma OMS las han llamado variantes de preocupación. Sobre este tema conversó la doctora Flor Helene Pujol, jefa del laboratorio de Virología Molecular del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC), en un
conversatorio en línea realizado por el Observatorio Venezolano de Fake News, proyecto de la Asociación Civil Medianálisis.
Pujol comentó que en este momento en el mundo hay cinco variantes de preocupación, como lo son la Alpha, Beta, Gamma, Delta y la más reciente que es la Ómicron; y dos variantes de interés denominadas Lambda y Mu, sin embargo, manifestó que la variante Delta es la que predomina en todo el país, en más del 95
% de los casos.
“En Venezuela tenemos la capacidad científica, técnica, sanitaria para detectar la Ómicron”, aunque actualmente no se han identificado casos confirmados de esta ni de la variante Beta. Señaló que con el sistema de vigilancia genómica y las herramientas que usa el IVIC pueden detectar las mutaciones e identificarlas de
manera rápida.
Las variantes en general surgen en un solo sitio y, por la conectividad general, se diseminan en todo el mundo.
La científica explicó que en muchos países, como Reino Unido, secuencian el genoma completo de los 30 mil nucleótidos que tiene el virus, y precisó que en nuestro país hay menos capacidad de secuenciar, de tal manera que el IVIC adoptó una estrategia racional y secuencia 563 mutaciones, lo que les permite diagnosticar con un 99 % de seguridad, para detectar el tipo de variante.
La especialista advirtió que “en Brasil ya está circulando la variante Ómicron y es muy probable que la tengamos próximamente en Venezuela”, por lo que propuso que se debe reforzar toda la vigilancia de viajeros que regresan al país.
A favor de una tercera dosis
La doctora Flor Helene Pujol fue enfática y precisó que la clave para que la pandemia se convierta en endemia está en la vacunación, aunque el éxito de las vacunas se mide cuando se realiza la fase 3 de la investigación y, después, la
efectividad en el terreno.
La doctora Pujol indicó que una vacuna puede tener una eficacia del 90 %, pero si se aplica en la región de Sudáfrica, donde está la variante Beta, la efectividad puede bajar a un 70 %, por dar un ejemplo. “No es un virus fácil de erradicar, por ser un virus que puede presentarse de forma asintomática”.
Manifestó que se debe aprender a convivir con él, como un virus endémico, con brotes casuales y aplicar dosis de refuerzos contra este virus.
Las vacunas son un milagro de la ciencia y de la tecnología, tuvimos en un año varias vacunas efectivas; ante la posible presencia de la variante Ómicron en el territorio venezolano, sugirió que la población acuda a vacunarse lo más rápido
posible, “la idea es cortar la cadena de transmisión para que no surja una variante venezolana, como surgió en Sudáfrica”.
Tratamientos contra la COVID-19
Ante el reciente anuncio del laboratorio Pfizer, con la píldora contra la COVID-19, el medicamento antivírico actúa como inhibidores de las proteasas (enzimas que ayudan a la ruptura de las proteínas), la especialista destaca que es una pastilla prometedora que ha demostrado resultados esperanzadores.
Además, argumentó que es útil tener una herramienta más para tratar de detener la replicación del virus, “los antivirales siempre van a hacer útiles en las etapas tempranas”, sin embargo, advirtió que se no se debe bajar la guardia con las medidas de prevención que ya son conocidas mundialmente y, además, mantenerse protegidos con la vacunación contra la COVID-19.