La corrupción se ha convertido en una cultura de vida para el chavismo.
Hoy en Guayana tenemos que ser más regionalista que nunca, porque la junta interventora de la Corporación Venezolana de Guayana no va a resolver los problemas y vicios que el socialismo del siglo 21 implementó en la región, toda vez que aún la Asamblea nacional no ha interpelado a nadie.
La denuncia fue hecha por Rachid Yasbek, presidente regional de Primero Justicia Bolívar al señalar que desde la llegada del gobierno bolivariano acabaron con el sistema de control previo, el sistema de licitaciones, en el estado venezolano.
“Ahí nace la corrupción, ya que como consecuencia la CVG perdió sus clientes naturales, importantes puestos de trabajos y más de 300 mil empleos indirectos, aunado que a los directos no han podido pagar las contrataciones colectivas y eso nos ha llevado a tener en Guayana la mayor corrupción vista después del desfalco de PDVSA”.
Considera que lo primero que se debió respetar fue la separación de poderes. Una cosa es lo que investigue el poder legislativo – explicó Yasbek- el poder judicial debe hacer el trabajo que le corresponde y sancionar a los culpables, todo eso se perdió cuando eliminaron el proceso de licitaciones públicas y ahí es cuando nace la corrupción porque empezaron los cuadres.
Explicó que con las licitaciones públicas, la inversión que había en Guayana con ingresos de más de 10 mil millones de dólares hacían próspera a la región, bajo la mirada supervisoria de la Contraloría General de la República, quienes insidian en los procesos de manera transparente, eso generaba empleo y daba salarios. “Los trabajadores por supuesto exigen hoy que se investigue todo, porque es evidente la corrupción en las empresas del holding CVG”.
Enfatizó que aún después de todo lo ocurrido no se ha interpelado a nadie en la AN administrada por los hermanos Rodríguez. “Aquí la pregunta es, sí de verdad se quiere saber quién fue o sencillamente están resolviendo un problema interno del Psuv, porque la corrupción no es solamente en PDVSA o la CVG, sino hasta de quien reparte las bolsas Clap, la corrupción se ha convertido en una cultura de vida para el chavista.
Ante este panorama resaltó que desde el partido justiciero, Henrique Capriles Radosnky si sabe cómo lograr volver a conectar el capital privado a las grandes asociaciones estratégicas, poner a los trabajadores en sus puestos de trabajo y lograr levantar las contrataciones colectivas, además de impulsar en los jóvenes guayaneses el poder soñar con grandes puestos de trabajo, recuperar el empleos y las empresas básicas de Guayana.