«Llegó el mes más bonito del año, diciembre de cantos, aguinaldos y alegrías, con el aroma y el sabor de la hallaca, el pan de jamón y la ensalada de gallina. Es el mes de la renovación de la fe en Cristo nuestro Señor. ¡Que la felicidad reine en todos los hogares venezolanos!», escribió el dictador venezolano el 1 de diciembre.
Hasta el año 2020, su régimen vendió la pierna de cerdo a quienes recibían las bolsas de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap), a precios subsidiados.
“¿Es cierto que 2022 será otro diciembre sin pernil navideño?”, preguntó Jesús Contreras, un usuario de Twitter, al gobernante venezolano y al ministro de Agricultura, Wilmar Castro, el 14 de noviembre.
Llegó el mes más bonito del año, diciembre de cantos, aguinaldos y alegrías, con el aroma y el sabor de la hallaca, el pan de jamón y la ensalada de gallina. Es el mes de la renovación de la fe en Cristo nuestro Señor. ¡Que la felicidad reine en todos los hogares venezolanos!
“Hasta ahora no tenemos información oficial al respecto”, comentó a El Pitazo, una jefa de comunidad del estado Miranda, quien pidió resguardar su nombre.
Otras personas consultadas creen que es probable que Maduro apruebe un bono que sirva de ayuda para comprar esta proteína en el mercado. Lo cierto es que la venta del rico cochino, un plato tan tradicional en nuestras navidades como la hallaca y el pan de jamón, siempre ha estado marcada por el descontento, la denuncia y la protesta; no obstante, en 2021 fue diferente: la pieza de cerdo no se comercializó a través de los Clap.
En su lugar, el chavismo otorgó un bono navideño de 46 bolívares (10 dólares) para la compra del pernil a través del Sistema Patria. Entonces, un kilo de esta carne oscilaba entre 5 y 6 dólares en el mercado tradicional.