Al menos tres personas, entre ellas un policía, murieron en una provincia del suroeste de Irán durante las recientes protestas por la falta de agua, informaron el miércoles medios oficiales.
El policía fue abatido en la ciudad portuaria de Mahshahr, en la provincia de Juzestán, informó la agencia noticiosa Irna.
“Durante los disturbios del martes por la noche en Taleqani (un barrio de Mahshahr), los agentes fueron tiroteados desde un tejado”, dijo el responsable en funciones del condado, Fereydun Bandari.
“Otro agente resultó herido en la pierna”, precisó.
La agencia de noticias Fars por su parte informó de la muerte de “un joven” en Izeh, y de heridas causadas a 14 agentes de policía.
Irna había informado previamente de la muerte de una persona en la ciudad de Shadegan, a unos 70 km al oeste de Mahshahr, el viernes.
Por su parte el periódico Etemad destacó que el acceso a internet estaba interrumpido en la capital de la provincia, Ahvaz, y completamente cortado en Shadegan.
Juzestán es la principal región productora de petróleo de Irán y una de las más ricas, pero se ve afectada por una persistente sequía que provoca protestas por el agua en varios pueblos y ciudades desde la semana pasada.
En los últimos días, medios de comunicación en lengua farsi con sede en el extranjero difundieron videos que, según ellos, mostraban protestas en Ahvaz, Izeh, Susangerd, Shadegan y Hamidiyeh, así como en Mahshahr.
Afirmaron que las fuerzas de seguridad habían dispersado por la fuerza a los manifestantes, pero los medios de comunicación nacionales restan importancia a estas informaciones.
Los videos compartidos en las redes sociales no han podido ser verificados de forma independiente.
– Etiqueta “Tengo sed” –
El gobernador de Juzestán, Qasem Soleimani Dashtaki, había negado el martes las informaciones sobre nuevas muertes entre los manifestantes. “Hemos insistido mucho en que las fuerzas de seguridad no se enfrenten violentamente con la gente, y mucho menos que abran fuego”, citó la agencia de noticias ISNA.
El diario Etemad afirma que el hashtag “Tengo sed” en árabe estaba siendo tendencia en las redes sociales para llamar la atención sobre la difícil situación de Juzestán, donde vive una gran minoría árabe sunita, que se queja con frecuencia de la marginación en Irán, principalmente chiíta.
“Hace tiempo que había señales de protestas y disturbios en la provincia, pero los funcionarios, como siempre, esperaron hasta último momento” para abordarlas, destaca Etemad.
Otro periódico reformista, Sazandegi, pidió al presidente Hasan Rohani y al presidente electo Ebrahim Raisi que visiten personalmente Juzestán para hablar con los manifestantes, “prometerles mejoras y pedirles que se vayan a casa”.
El gobierno había enviado el viernes una delegación de viceministros a la provincia para abordar la escasez de agua.
La televisión estatal mostró el miércoles una larga fila de camiones de agua, diciendo que habían sido enviados a Juzestán por el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria de Irán tras una medida similar del ejército el día anterior.
A lo largo de los años, las abrasadoras olas de calor del verano boreal y las tormentas de arena estacionales que soplan desde Arabia Saudita y de Irak han secado las antaño fértiles llanuras de Juzestán.
Los científicos afirman que el cambio climático amplifica las sequías, y su intensidad y frecuencia amenazan a su vez la seguridad alimentaria.
AFP