La Policía española desmanteló un laboratorio clandestino de procesamiento de cocaína en una finca de la provincia de Toledo, próxima a Madrid, y detuvo a cuatro hombres de nacionalidad colombiana mientras “cocinaban” grandes cantidades de droga.
Según informó este domingo la Policía, además de esos cuatro detenidos, los agentes arrestaron a otra persona de nacionalidad española encargada de la vigilancia, e intervinieron 50 kilogramos de clorhidrato de cocaína y 3.000 litros de precursores químicos.
Dos de los cuatro “cocineros” se habían desplazado expresamente desde Colombia a la finca de Toledo para llevar a cabo el proceso de manipulación de la cocaína, ya que eran las únicas personas con los conocimientos técnicos con las que contaba la organización, que disponía de infraestructura para producir unos 150 kilogramos de cocaína mensuales.
La investigación sobre este grupo comenzó a principios de año, cuando la Policía recibió la información de que supuestamente una organización de narcotraficantes tenía instalado un laboratorio clandestino en la zona sur de Madrid que se dedicaba a la extracción, producción y adulteración de clorhidrato de cocaína.
De forma paralela, y a través de la cooperación internacional, la Policía sospechó de que un grupo de narcotraficantes asentados en España estaba esperando un importante cargamento de sustancia estupefaciente oculta en un contenedor marítimo que tenía previsto llegar al puerto español de Valencia (este), y también supieron que el entramado criminal en España había creado un centro de extracción, transformación y adulteración de la sustancia estupefaciente en la provincia de Toledo.
Con todas las pesquisas, los investigadores localizaron la finca donde se ubicaba el laboratorio, en la que hallaron cerca de 50 kilogramos de clorhidrato de cocaína en el último estadio antes de cristalizar y donde también se ubicaba la zona del filtrado, prensado y empaquetado de la sustancia estupefaciente. La cocina de la casa era la zona de secado y embalado final.
La operación la llevó a cabo el Grupo Especial de Operaciones (GEO), grupo de élite de la Policía española.
EFE