Preparar el viaje llevó poco tiempo para Darielvis Sarabia, La Tata, una joven madre que con muy pocas cosas se marchó con sus dos pequeños hijos a Trinidad para reunirse con su esposo, quien ya llevaba 8 meses trabajando en esa isla para poder enviarles dinero. Danna y Yaelvis Santoyo Sarabia, emprendieron el rumbo con su madre una joven de 22 años, que intentaba trabajar en el vecino país, las condiciones aquí no les favorecían. Trabajaba como maestra en una escuela. El domingo en la mañana la noticia corrió por las redes y teléfonos. Una embarcación de la Guardia Costera de Trinidad, en la noche del sábado interceptó el bote. Iban 20 almas buscando mejor calidad de vida, pero no fue posible. El organismo de seguridad dijo que el bote “embistió” al buque y no pararon, que habían agotado las medidas que prevé el protocolo y dispararon contra el bote porque se vieron “amenazados”. Dispararon contra el motor para neutralizarlos. La joven madre aun conmocionada narró que les dispararon mucho. No hubo intercambio de disparos. El niño de un año es impactado en la cabeza y ella es herida entre el brazo y la clavícula. La guardia costera los neutraliza. Darielvis es llevada a un hospital en sangre Grande, su niño todavía está en la morgue y Danna permanece con el resto de los pasajeros en el Helipuerto de Chaguaramas, mientras le descartan covid. Dos días de silencio tiene calle Libertad en Tucupita. No pueden dar crédito a lo ocurrido. Ambos padres están impactados por el suceso. Diferentes personas en Tucupita han fijado posición frente a este vil asesinato de un niño. El gobierno venezolano pidió una investigación sobre este hecho donde perdiera la vida un niño de un año: Yaelvis Santoyo Sarabia. El primer ministro de Trinidad y Tobago Keith Rowley, expresó las condolencias a la familia y a los venezolanos en general, pero el dolor no entiende de trámites diplomáticos y palabras que no curan.
En Trinidad venezolanos planifican un marcha para el 12 de febrero por la muerte del bebé migrante y en Caracas hoy se realizó una protesta frente a la embajada trinitense. Se hacen diligencias para tener a Danna con el padre. Darielvis sigue hospitalizada y la niña llora porque nunca se había separado de su mamá. Ojalá puedan reunirse pronto los tres.
Fotografía: Cortesía