Desde 1998 son víctimas de presuntos abusos por parte de cuerpos de seguridad del Estado
Por décima vez la Corte Interamericana renovó medidas provisionales para proteger la vida de 23 integrantes de la familia Barrios.
El máximo tribunal en materia de derechos humanos del continente emitió una resolución que ampara a este grupo familiar perseguido y hostigado desde 1998 por presuntos funcionarios del Estado, en un acoso que ya ha causado la ejecución extrajudicial de 10 de sus miembros.
El documento de la Resolución publicada por la Corte IDH es claro en cuanto a la obligación que significa para Venezuela el cumplimiento de estas medidas, aunque el Estado haya manifestado su decisión de separarse de la Convención Americana:
Acoso desde hace 20 años
El acoso contra la Familia Barrios comenzó en 1998, cuando uno de sus miembros, Benito Barrios, fue sacado a patadas de su casa en la comunidad de Barbacoa, estado Aragua. Horas más tarde su cuerpo llegó a la morgue con disparos en el pecho. A partir de ese momento, los presuntos funcionarios iniciaron una persecución sistemática contra hombres y mujeres de esta familia, quienes han perdido a 10 miembros.
COFAVIC, en conjunto con la ONG internacional Cejil, acompañó la denuncia de este caso ante las instancias nacionales e internacionales desde el inicio. En 2004, la Corte IDH emitió la primeras medidas provisionales (de protección) a este grupo familiar, las cuales ha renovado consistentemente. La reciente renovación de medidas es la número 10, lo cual evidencia la dimensión del acoso. Venezuela, por su parte, manifestó su separación de la OEA en 2013, por tanto, el cumplimiento de la serie de medidas es obligatorio, pues fueron emitidas antes de esa fecha.
El pasado 26 de enero de 2021 tres presuntos miembros de la policía municipal del Municipio de Carrizal del Estado de Miranda, uniformados y portando armas de fuego, habrían ingresado por la fuerza y sin orden judicial a la residencia de la familia Cabrera Barrios. Luego de identificar al esposo de Eloísa Barrios, los presuntos policías lo habrían esposado, golpeado, y habrían amenazado a su esposa de darle una golpiza y llevársela detenida por obstrucción a la justicia, mientras que su hijo Ángel, al ver lo que ocurría, comenzó a llorar. Cabrera habría sido detenido y posteriormente trasladado en una patrulla a la sede de la Policía. Según los familiares, una vez acostado en el piso de la patrulla, uno de los policíasle habría colocado su bota sobre su rostro hasta que llegaron a la estación policial. Al llegar a la estación, Cabrera fue trasladado a una celda con poca iluminación y lo habrían golpeado en todas las partes de su cuerpo, fue colocado boca abajo, esposado y mientras le golpeaban, le colocaron una bolsa en la cabeza, asfixiándolo.
Cabrera Barrios informó a los funcionarios que gozaba de medidas provisionales ordenadas por la Corte Interamericana de Derechos Humano´, sin embargo, los presuntos funcionarios le manifestaron: “Nosotros no tenemos nada que hacer con eso, no nos interesa nada”.
Un total de 23 integrantes de la Familia Barrios continúa siendo víctima de hostigamiento y con la nueva resolución de medidas provisionales se espera preservar su vida e integridad física.