Regina Freites | Sucre
La ola de calor que azota al oriente del país, hace que salir a la calle durante el día sea un proceso casi obligado para los carupaneros, que en parte son suspendidas cuando arrecia la presión, concentrándose el sopor cuando las inestables precipitaciones registradas hasta el momento aparecen brevemente.
Al contrario de los estados occidentales, que están seriamente afectados por el paso de las primeras ondas tropicales de la temporada, la presión de calor que ronda los veintiocho grados, hace que las personas hagan un receso en su recorrido buscando sombra, mientras los que viven sin aire acondicionado salen a «agarrar aire» a las puertas de sus casas, con el susto del mito de que: «puede temblar» ; variando el tiempo repentinamente con nubes que descargan lluvia en momentos imprevistos en breves períodos.
Sufren los mayorcitos
Esta inestabilidad atmosférica repercute en la salud mayoritariamente de las personas de la tercera edad, quienes ante la permanencia en la exposición del sol, sufren desmayos, bajas de tensión entre otras afecciones de salud sugiriendo las autoridades descanzo, ingerir mucho líquido y desarrollar lo más equilibradamente posible las actividades diarias.
