Colombia registró una inflación de 0,32% en julio, un dato superior al esperado por el mercado, informó el jueves el Gobierno, en medio de una reactivación del consumo doméstico a medida que se recupera la economía de los efectos de la pandemia de coronavirus.
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El comportamiento de los precios en el séptimo mes contrastó con la caída de 0,05% que se registró en junio, así como con la estabilidad que se registró en julio de 2020, precisó el Departamento Nacional de Estadísticas (DANE) en un informe.
En un reciente sondeo de Reuters, la mediana de los analistas esperaba una inflación de 0,03% para el séptimo mes.
Los mayores incrementos en julio se dieron en los precios de la división de restaurantes y hoteles con un 0,80%, en los alimentos y bebidas no alcohólicas, así como en los de la recreación y la cultura con un 0,38% respectivamente, así como en los servicios públicos con un 0,31%.
En contraste, los precios del sector de información y comunicación cayeron un 0,11%.
En el acumulado entre enero y julio la cuarta economía de América Latina reportó una inflación de 3,47%, frente al 1,12% en igual periodo del año pasado y por encima de la meta puntual del Banco Central, de 3%.
En tanto, en los últimos 12 meses el país acumuló una inflación de 3,97%, contra un 1,97% en el mismo tramo del año previo.
Las expectativas de inflación para el total de este año aumentaron en el sondeo de julio a un 3,81%, desde el 3,72% que arrojó la consulta del mes pasado, alejándose de la meta puntual establecida por el Banco Central.
El control de la inflación fue uno de los principales factores que ayudó a que el Banco Central redujera su tasa de interés de referencia hasta el actual mínimo récord de 1,75%, en busca de impulsar una rápida recuperación de la economía, golpeada por la pandemia de coronavirus, que la llevó a contraerse un histórico 6,8% el año pasado.
La mayoría de analistas pronostica que el Banco Central comenzaría a subir su tasa de interés a partir de septiembre, para controlar las presiones inflacionarias derivadas de una recuperación de la economía más rápido de lo esperado, que la llevaría a expandirse un 7,5%, según la proyección del organismo revisada al alza la semana pasada.
