Pilar Guerra | Cojedes
Habitantes del sector La Estancia de Taguanes, en el municipio Tinaquillo, denuncian que los malos olores provenientes de una fábrica que procesa materia orgánica animal ocasiona enfermedades respiratorias y grave contaminación ambiental.
La medida de protesta pacífica frente a la entrada de la empresa, fue antecedida de reclamos que no han sido escuchados por las autoridades del gobierno, Ministerio Público y Ambiente.
Neptalí Colmenares, líder vecinal, señaló que la fábrica tiene 8 años en funcionamiento. Los dos últimos años la contaminación ambiental se ha incrementado con los olores desagradables a toda hora. Hay niños y adultos mayores enfermos con asma, bronquitis y erupciones en la piel.
Mayra Ramírez, residente, precisó que la situación afecta al menos a 200 familias del sector La Estancia de Taguanes, pero igual se extienden los malos olores a las comunidades de La Floresta, Caja de Agua, El Bajío, Fortiquera e incluso la capital del municipio.
Aseguró que inhalan a toda hora los olores putrefactos. Hay niños y adultos mayores que presentan dificultades respiratorias. No pueden ni comer tranquilamente. Hay abundantes moscas y zamuros en los alrededores.
Carlos Ortega, habitante de Tinaquillo, sostiene que la empresa genera empleo a los lugareños, pero la falta de tratamiento sanitario merma la calidad de vida de los pobladores.
«Se trata de lograr acuerdos entre los empresarios, el gobierno y las comunidades afectadas para buscar una solución definitiva. Es un hecho la presencia de los malos olores», puntualizó Ortega.
Cabe destacar que los vecinos permanecieron unas dos horas bajo el inclemente sol a la espera de ser atendidos por los dueños o encargados de la cuerera, pero no salió ningún representante que planteara alternativas de resolver la problemática.
Texto y fotos: Pilar Guerra