Xavier José un venezolano de 28 años de edad lleno de aspiraciones, ganas de vivir grandes experiencias y ayudar a su familia es uno de los tantos jóvenes que un día tomó una maleta, empacó todos sus sueños y repleto de valentía apostó por encontrar un futuro mejor fuera de su país. Con dos años y medio, en Bogotá, Colombia lo que más le ha costado aceptar es estar lejos de su familia, de sus padres y hermanos.
Navidades, fechas especiales, cumpleaños y ahora por tercer año consecutivo celebra el día del padre sin “el gordo”, como él mismo le dice a su papá, a su lado. Sin embargo, pese a los miles de kilómetros que los separan Xavier, nos cuenta que el amor y la comunicación con su papá “jamás se ha perdido” pues, todos los días hablan, se ven, se cuentan su trajinar diario, lloran y se ríen juntos.
“Nunca pensé estar lejos de mi viejo, jamás pensé irme a vivir fuera del país. Ya no veo el momento de poder llegar a mi hogar, ver a mi papá y abrazarlo”, expresó.
Al preguntarle, sobre cómo es vivir y celebrar este día del padre teniendo a su papá tan lejos, este joven quien trabaja y ha adquirido grandes conocimientos en el área de la construcción, afirmó que sin importar la distancia – aunque no sea lo mismo – le mandará todo el cariño y lo llenara de detalles, llamadas y mensajes en este día tan especial.
“Siempre hemos sido muy unidos, todos los años en esta fecha nos reuníamos y celebrábamos a lo grande. Eso es lo que más extraño, compartir momentos con mi familia, con él”, aseveró.
“Él es mi vida”
Mientras que, Lisandro José papá de Xavier expresó que no hay día que no desee el momento de escuchar que alguien toque la puerta, salir y ver que su hijo regresó a casa.
“Cuando vuelva lo primero que haré es agradecer a la vida por tenerlo de nuevo en casa, lo abrazaré con las ganas de nunca más dejarlo ir”, aseguró con nostalgia Lisandro.
Sin duda alguna, para los jóvenes venezolanos en el exilio lo que más difícil ha sido es estar lejos de su familia, de su gente, de su cultura. Y en estas fechas tan especiales e importantes para muchos, ese sentimiento de añoranza y anhelo de volver abrazar a los suyos se hace mucho más latente en fechas cómo está.
“Mi hijo sabe que aunque pasen y pasen los años, siempre estaré aquí esperando por él, mis brazos siempre estarán abiertos para él. Xavier y mis otros dos hijos lo son todo para mí”, finalizó.
Este es un hermoso homenaje que El Tiempo le ofrece a todos los padres de los venezolanos que celebran este día, lejos de sus familias.
¡Feliz día del Padre!