Especial | Karla Ávila
Alberto Ramos sueña en ser cantante y con tan solo 16 años, todos los días al salir de sus clases de bachillerato, se alista para interpretar un amplio repertorio de rancheras en la calle, puesto que de ahí genera recursos económicos para ayudar a su familia.
Su talento y sus ganas de salir adelante son las herramientas con las cuales Alberto se arma todos los días para afrontar las bendiciones que le depara la vida.
Sueña con ser artista y arquitecto, pero mientras construye su sueño, canta en diversos sitios de Alta vista en Puerto Ordaz. Con el dinero conseguido ayuda económicamente a su madre y sus dos hermanos.
Cuenta que desde que cumplió 11 años se inició, sin pena, a interpretar a viva voz en el mercado de Unare y en la vía principal de Barrio Guayana, durante los fines de semana. “Me gusta cantar baladas y rancheras especialmente si son de Vicente y Alejandro Fernández, pero como tenemos necesidad de comprar alimentos y no tenemos, debo trabajar en esto que me gusta”.
Alberto actualmente cursa el 5to año de bachillerato en el liceo Unare III, vive en El Llanito al final de la avenida Atlántico junto a su madre y dos hermanos quienes manifiestan sentirse orgullosos de que este nobel artista sea el sustento de su familia y que con su esfuerzo trate de cumplir con las necesidades básicas de su hogar.
Jenni Fermín es su madre, no trabaja en la calle sino que se desempeña como ama de casa y en estos momentos presenta un problema de dificultad visual, debido a que sufre exceso de carnosidad en sus ojos, lo que le impide trabajar porque esta condición le limita.
En los actuales momentos se puede disfrutar de su talento en las inmediaciones de Ciudad Traki o en el café de La Caribeña en Alta Vista y las reacciones percibidas de quienes lo han escuchado es que al cantar mueve toda la fibra humana, gracias a su talento.
Es preciso destacar que el talento de Alberto es innato, no ha recibido clases de canto, pues su madre no cuenta con los recursos económicos para costearle, ese tipo de formación, todo es talento natural y ganas de salir adelante.