El ministro de Relaciones Exteriores del régimen iraní contrajo coronavirus, según informaron medios locales, en momentos en que la República Islámica dijo estar dispuesta a volver a las negociaciones internacionales sobre su controvertido programa nuclear.
Hossein Amir-Abdollahian, de 57 años, “dio positivo por coronavirus”, indicó la agencia de prensa Tasnim.
Este diplomático de carrera fue nombrado en agosto pasado como nuevo ministro de Relaciones Exteriores por el presidente ultraconservador Ebrahim Raisi.
“El estado general (del ministro) es satisfactorio y continúa con su trabajo diario en cuarentena”, anunció el portavoz del ministerio Said Khatibzadeh, citado por la agencia oficial Irna.
Este anuncio tiene lugar luego de que Khatibzadeh anunciase el lunes que las conversaciones sobre el programa nuclear iraní comenzarían “en las dos o tres semanas próximas”.
El régimen de Irán había cerrado en 2015 un acuerdo histórico con China, Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Rusia y Alemania, que permitió relajar las sanciones internacionales contra Teherán a cambio de limitar drásticamente su programa nuclear, así como aportar garantías de que no buscaba hacerse con la bomba atómica.
Pero Estados Unidos se retiró del pacto de manera unilateral en 2018 bajo la administración de Donald Trump y restableció las sanciones contra Irán quien, en respuesta, se fue desentendiendo de sus compromisos e incumplió en numerosas oportunidades lo pactados en 2015.
Desde junio de este año las negociaciones para relanzar el acuerdo están en punto muerto. Sin embargo, ahora Irán dijo estar dispuesto a relanzarlas.
Los mandatarios de Estados Unidos, Francia, el Reino Unido y Alemania expresaron el fin de semana pasado su “viva y creciente preocupación” por el incumplimiento del acuerdo de 2015 sobre el programa nuclear iraní por Teherán, al que instaron a “cambiar de rumbo”.
“Expresamos (…) nuestra viva y creciente preocupación frente al ritmo acelerado de las provocadores medidas adoptadas por Irán en el ámbito nuclear”, reza la declaración conjunta de los líderes, que advierten que Washington no volverá al pacto si Teherán persiste en su actitud.
“Estamos convencidos de que sigue siendo posible lograr rápidamente y poner en marcha un acuerdo sobre la vuelta al cumplimiento” del pacto, indicaron los cuatro dirigentes occidentales en su declaración, en la que precisan que “esto solo será posible si Irán cambia de rumbo”.
Ante la reimposición de sanciones por parte de Estados Unidos, Irán, presidido entonces por el moderado Hassan Rohani, decidió reanudar la producción de uranio altamente enriquecido, generando preocupación entre los europeos que querían salvaguardar el pacto.
El pasado abril comenzaron negociaciones en Viena con seis grandes potencias, entre ellas Estados Unidos de forma indirecta, para lograr el regreso de Washington al pacto y que Irán vuelva a cumplir el acuerdo, pero quedaron en suspenso con la llegada al poder en agosto de Raisí.Los líderes reunidos en Roma manifestaron su voluntad de que Irán “nunca” pueda desarrollar un arma nuclear y compartieron su preocupación de que, tras salir en junio de las negociaciones, Irán “ha acelerado el ritmo de pasos nucleares provocadores”.
Entre estos la producción de uranio altamente enriquecido o la menor transparencia y cooperación con la Organismo Internacional de Energía Atómica, lo que dificulta el regreso a las negociaciones, sostuvieron. ”La situación actual subraya la importancia de una solución negociada que proporcione el regreso de Irán y Estados Unidos al pleno cumplimiento del JCPOA y proporciona la base para un compromiso diplomático continuo para resolver los puntos de controversia restantes, tanto nuestras preocupaciones como las de Irán”, zanjaron.
Con casi 6 millones de casos positivos, Irán ha sido el país más afectado por la pandemia en Medio Oriente. Con una población de 84 millones de habitantes ha registrado más de 125.000 muertes.
Las autoridades iraníes han advertido que, con menos del 45% de la nación totalmente vacunada, se esperan más repuntes del virus. La última oleada se produjo en agosto, impulsada por la contagiosa variante delta.
En Irán, menos de la mitad de la población sigue medidas como el uso de mascarillas y el distanciamiento social.
Con información de AFP y AP | Infobae