El Banco Central de Rusia suspendió este miércoles la compra de divisas en el mercado interno para frenar el desplome del rublo, provocado, en gran medida, por la caída de las exportaciones y el alza del coste de las importaciones.
“Se tomó la decisión con el fin de reducir la volatilidad de los mercados financieros”, explicó la entidad emisora en un comunicado.
La medida, que estará en vigor desde el 10 de agosto hasta finales de año, podría ser revertida en caso de que mejore la situación en los mercados, añade la nota.
La moneda nacional rusa superó este miércoles en la bolsa de Moscú los 98 rublos por dólar por primera vez desde el 25 de marzo de 2022, mientras que el euro se llegó a cotizar a 108 rublos.
El punto más bajo de la divisa rusa se alcanzó el 11 de marzo de 2022, dos semanas después del inicio de la guerra en Ucrania, cuando cayó a 120 rublos por dólar estadounidense.
El rublo no ha dejado de depreciarse en las últimas semanas, tendencia que ha empujado a tomar esa medida al Banco Central, que seguirá vendiendo divisas vinculadas con el Fondo Nacional de Bienestar.
Aumento rápido
La inflación, una de las principales secuelas del desplome del rublo, aumentó hasta el 4,3% en julio desde el 3,25% en junio, mientras que los precios han subido un 3,41% en lo que va de año.
Aunque la prensa informa de que muchos de los productos básicos se han encarecido notablemente, especialmente el pollo, que marca máximos históricos.
Las sanciones occidentales redujeron notablemente los ingresos por la exportación de hidrocarburos -el gas cuesta diez veces menos que el pasado año-, mientras las importaciones se acercan a los niveles anteriores al inicio de la contienda.
Además, los rusos están demandando más divisa extranjera tanto debido a las vacaciones estivales como la incertidumbre económica y geopolítica, lo mismo que ocurre con los empresarios occidentales que venden sus negocios en Rusia.
Otro factor que ha influido es la falta de buenas noticias del frente ucraniano y la inestabilidad política provocada por la fallida rebelión armada protagonizada hace mes y medio por el jefe del Grupo Wagner, Yevgueni Prigozhin.
La caída del rublo coincidió con el informe del Ministerio de Economía que elevó al 1,4% el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) en el primer semestre.
Después de una contracción del 1,8% en los primeros tres meses de 2023, el PIB creció un 3,4% en abril; un 5,4% en mayo y un 5,3% en junio.
EFE
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