A 10 días de la habilitación del Puente Atanasio Girardot -conocido también como Puente Tienditas- para el paso de vehículos entre Colombia y Venezuela, la apertura de la frontera entre ambos países no se encuentra al 100%, debido a que a través de los otros tres puentes internacionales que existen entre Táchira y Norte de Santander, no ha sido habilitado el paso de vehículos livianos
Por Anggy Polanco / Corresponsalía La Patilla
Por ejemplo, a través del emblemático Puente Internacional Simón Bolívar siguen realizando el trasbordo de las urnas en la mitad del puente, pues las autoridades de ambos países no permiten el paso de vehículos particulares través de esta estructura binacional.
Mientras, las personas siguen utilizando esta ruta para transitar a pie, porque es el trayecto más corto para llegar a la capital nortesantandereana, para quienes viajan desde San Cristóbal y zona sur del Táchira y los residentes de San Antonio.
De igual manera sucede con el Puente Francisco de Paula Santander, situado en Ureña, el cual es la ruta más rápida para los habitantes de este municipio que acuden por estudios o trabajo a la capital nortesantandereana.
Por el Puente Unión, situado entre la parroquia Boca de Grita del municipio García de Hevia (Táchira) y Puerto Santander (Norte de Santander), las personas siguen transitando a pie, confirmó el presidente de la Asociación de Comerciantes de García de Hevia, Juan Medina, que relató que cuando se acercó a esta estructura binacional, se dio cuenta de que por allí no permitían el paso de vehículos.
Medina relató que los habitantes de la zona norte del Táchira no tienen ningún beneficio significativo con la apertura vehicular por el Puente Atanasio Girardot, en vista de que para los residentes de los municipios García de Hevia, Panamericano, Jáuregui, Samuel Darío Maldonado, así como zonas del estado Mérida y Sur del Lago de Maracaibo, es más cerca llegar a Colombia a través de Boca de Grita.
Dijo que no tiene sentido que los habitantes de la zona norte tengan que viajar tres horas en vehículo para llegar a Cúcuta, cuando tienen un puente a menos de una hora.
Por su parte, Isabel Castillo, presidenta de la Cámara de Comercio del municipio Bolívar, aplaudió la apertura al paso de vehículos, pero consideró que es necesario que la frontera sea abierta para vehículos a través de todos los puentes, las 24 horas del día, dado que para los residentes de San Antonio es más costoso realizar la ruta por el Puente Atanasio Girardot.
Con respecto al transporte público, desde el terminal de San Cristóbal, hasta este martes, no se había activado el servicio directo a Cúcuta, pese a que los choferes están cumpliendo con los requisitos que exige Colombia y la autorización de la central de transporte de Cúcuta.
Freddy Solano, representante del gremio de transportistas de la frontera, informó que este lunes sostuvieron una reunión en la central de transporte de la capital nortesantandereana para finiquitar los detalles del tránsito de las rutas venezolanas.
Este es uno de los servicios que espera con ansias la población tachirense, dado que muy pocos venezolanos tienen el poder adquisitivo para pagar las altas sumas del Seguro Obligatorio para Accidentes de Tránsito (Soat) que exige Colombia.
Muchos tachirenses consideran que las reglas del juego son desiguales, puesto que los colombianos solo tienen que comprar un Seguro de Responsabilidad Civil que no supera los 50.000 pesos colombianos (cop), mientras que los venezolanos deben adquirir el Soat que tiene un valor que supera los 600.000 cop.
