El bicampeón mundial de karate expresó que se identifica con lia institución financiera, porque cree en la innovación, en la cercanía con la gente y en buscar soluciones para el ciudadano.
El nombre de Antonio Díaz trasciende fronteras y es común que en el karate le asocien con la palabra “leyenda”, por su positivo impacto que durante más de 25 años ha tenido en la disciplina. Lo hacen en Venezuela y en el mundo entero.
En los Juegos Olímpicos de Tokio, poco después de ejecutar su último kata en el Nippon Budokan, sitio emblemático para el judo en Japón, sus rivales casi al unísono afirmaron que el venezolano “les abrió un camino”. Ha sido uno de los más grandes de la historia.
En los Campeonatos Mundiales de Karate logró dos de oro en Belgrado 2010 y París 2012, una de plata en 2008 y cinco de bronce en 2002, 2004, 2006, 2014 y 2016. Nadie ha alcanzado tantas medallas como él.
Ostenta el Récord Guinnes como el karateca masculino con mayor cantidad de oro en competiciones individuales.
Hoy Bancamiga Banco Universal se enorgullece de presentar a este pentacampeón mundial de karate y diploma olímpico en los Juegos de Tokio 2020 como su embajador.“Estoy muy feliz de formar parte de la familia de Bancamiga.
Juntos vamos a hacer cosas maravillosas y a seguir trabajando por Venezuela. Me identifico con Bancamiga, porque también creo en la innovación, en la cercanía con la gente y en buscar soluciones para el ciudadano. Por eso hacemos un gran equipo”.
Fue a los seis años cuando por influencia de su padre comenzó a practicar el karate y desde un primer momento soñó con ser campeón mundial y llegar a unos juegos olímpicos. Pudo hacerlo. Y es por eso que no duda en afirmar que para lograr una meta hay que ser constante, insistir y tener disciplina.
En su palmarés ganó 16 campeonatos panamericanos individuales. Eso lo convirtió en el único atleta de América que en kata lo ha logrado. También tiene un campeonato mundial de combate y ocho veces fue campeón de la World Karate Federation. “En el camino no solo hay éxitos.
También hay caídas pero lo más importante es aprender. Cada una de las derrotas enseña y te hace crecer en el deporte y en la vida”, afirmó Díaz, quien representa algunos de los valores que conforman el ADN de Bancamiga como son integridad, compromiso, responsabilidad y respeto, y que sin duda también son intrínsecos a lo que es ser un buen deportista y ciudadano.