En el Comando Con Vzla sabemos que el 28 de julio tendremos una elección que no será un acto libre, ni justo. No es libre porque no podremos votar por la candidata que escogimos en primarias y porque casi 10 millones de venezolanos no podrán cumplir con su derecho al voto: unos están afuera y no pudieron formalizar su inscripción y otros a última hora han sido movidos y trasladados de su centro de votación.
A esta situación se le agrega la criminalización que ha hecho el régimen de Maduro persiguiendo a líderes políticos de este comando.
Perseguidos, presos y asilados
Hoy, el Comando Con Vzla tiene 4 jefes de campaña presos, 3 de ellos desde el 23 de enero y uno desde el 9 de marzo (Juan Freites, Luis Camacaro, Guillermo López, Emill Brandt). Dos dirigentes nacionales de campaña también están presos en El Helicoide, Dignora Hernández y Henry Alviarez, hoy con 86 días de reclusión.
No solo se trata de estos dirigentes a quienes se les han acumulado días perdidos de su vida, sino que se les ha violado el derecho a la defensa. Se han iniciado contra ellos juicios en los cuales ellos no pueden alegar su propia defensa, juicios donde no pueden alegar nada sobre lo que se les imputa. Se les ha sometido a desapariciones forzadas. En algunos caos, esas desapariciones llegaron a los 27 días de desaparición forzada, como es el caso de Camacaro, López y Freites.
Hemos presentado recursos de habeas corpus, solicitudes de extrema vigilancia y todos han sido negados. Ellos han sido presentados fuera de los espacios naturales, fuera del recinto del tribunal y hasta desde sus espacios de reclusión.
Esos detenidos se suman a todos los detenidos hoy por motivos políticos, como Javier Tarazona, Rocío San Miguel y más de 200 venezolanos recluidos sin derecho a la defensa.
También tenemos 5 dirigentes asilados en la Embajada Argentina (Magalli Meda, Claudia Macero, Pedro Urruchurtu, Omar González y Humberto Villalobos), quienes junto al ingeniero Fernández Martínez Mottolla, miembro de la mesa de negociación, cumplen hoy también 86 días con asilo de la República de Argentina y mientras el régimen niega el debido salvoconducto que establece la ley.
Quise iniciar este reporte con esas cifras y nombres porque ellos son nuestra razón de ser política. Ellos, como la mayoría de los venezolanos, nos encontramos en libertad condicional.
El 28 de julio tiene una significación que va más allá de lo electoral. Por cada familia, por cada venezolano que padece por el régimen, por ellos es nuestra lucha electoral.
Es una lucha electoral en la que estamos absolutamente confiados de que vamos a ganar, porque estamos ya ganándola.
Somos mayoría
El 28 de julio será el triunfo refrendado. Vamos a ganar porque el socialismo ya está derrotado, no es ni el socialismo del siglo XXI, es el que está en la cabeza de Maduro. Creyó el régimen que con dádivas podían mantener el apoyo de la gente, pero se olvidaron de su conciencia y su corazón. Pero allí es justamente donde está hablando la líder del país, María Corina. Ella, al igual que Edmundo González, futuro presidente, le hablan al rescate de la nación, de recuperar la decencia en las formas de hacer política, del reencuentro de los venezolanos y no de la persecución.
Será una Venezuela donde el chavista pueda tener espacio, donde cualquier que no haya cometido corrupción, ni crimen, pueda manifestarse políticamente.
En estos 24 años han sido muchas las víctimas y es la justicia la que queremos que reine. Esa es la justicia que pronto vamos a ver, una que repare a las víctimas. Una justicia reparadora y no persecutora.
Nadie le cree al régimen, no tienen nada que perder, somos una mayoría que dijo “ya basta” y que apostamos al cambio y la libertad.
Preparación electoral
Nos preparamos en varias áreas, una de ellas es lo electoral. Hemos recorrido el país con María Corina para sumar nuevos apoyos y levantar el ánimo que estaba dormido, pero al mismo tiempo hemos invertido un valioso tiempo en organización para la defensa del voto.
Todo lo que hacemos es para vigilar los centros de votación y cuidar la voluntad de los venezolanos. El régimen opera donde no hay un testigo nuestro, donde no exigimos el conteo papelito por papelito. Ese derecho estamos hoy conscientes que debemos ejercerlo.
Se han creado 1600 centros de votación nuevos, y hay unas 30 mil mesas. Hemos creado un aparato para responder a eso que hemos llamado 600K, y que aportará más de un testigo por mesa. Este acompañamiento al hecho electoral será mayor y absolutamente integral y tiene en su base a los Comanditos, que han asumido de manera emotiva el reclamo de los ciudadanos.
Los Comanditos son hoy espacios comunitarios para el ejercicio compartido de la verdad como instrumento de lucha civil. En los Comanditos se construye un sentido útil de la verdad, y esa verdad hoy es el acto electoral del 28 de julio.
Este aparato que está a punto de consolidarse nos permitirá ubicar a los testigos en centros recónditos controlados por el régimen, lugares que nunca debieron ser centros de votación.
Debemos ser mayoría no solo en la calle, sino en los centros de votación.
Tareas ciudadanas
Tenemos tareas ciudadanas que cumplir:
- Verificación ciudadana: No podemos quedarnos por fuera. Verifica tus datos en el CNE. SMS con tu número de cédula al 2637. Verifica tus datos con otros compañeros.
- El día de la votación, el centro electoral debe convertirse en un espacio para el reencuentro ciudadano, el centro de votación no es un espacio militar, sino civil. No lo abandones. La ley te permite que te sumes activamente. El artículo 140 de la Ley de Procesos electorales dice que el acto de escrutinio es público. Debemos colmar los centros electorales como espacios civiles, hasta que el último testigo tenga copia del acto de votación.
- A los jóvenes: a aquellos que no creen que tenemos una oportunidad real, convéncelos; lidera la cuenta regresiva de este proceso que termina el 28 de julio. Recuérdale a todos que deben votar. Vamos a ganar para que tú, y muchos jóvenes como tú, tengan voz.
- A los venezolanos en el exterior: ustedes pueden ser grandes movilizadores del voto. Aunque no votes, porque el régimen así lo quiso, ayúdanos a concientizar a otros, a decirle a nuestros aliados democráticos que podemos ganar, convence a funcionarios del país donde vives que existe la posibilidad real de ganar.
El triunfo solo lo lograremos organizándonos activamente. Nadie puede cantar victoria hasta que el último testigo tenga el acta de totalización en su mano. Convirtamos la esperanza en voto y la voluntad en fuerza para cobrar la victoria.
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