Regina Freites
Una taza de arroz con una rodaja de mortadela o una sardina frita con un bollo de harina de maiz es la comida que dan una vez al día en el hospital «Santos Aníbal Dominicci» en la ciudad de Carúpano en el estado Sucre, dieta que los familiares consideran de denigrante digestión por su escaso contenido nutricional.
La inquietud derivada de una serie de quejas sustentadas en el tiempo salió a la luz luego que los pacientes estuvieran casi un mes recibiendo como única comida arroz con una rodaja de mortadela que en muchas ocasiones su organismo no toleraba digerir, conociéndose durante ese periodo que la limitación derivaba del presunto abastecimiento de solo cuatro mortadelas para alimentar a alrededor de 135 pacientes que en ese entonces se encontraban recluidos en el principal centro de salud de la zona de Paria.
La necesidad obliga
La situación ante el hambre y la necesidad se callaba en medio del ruido social: «Muchos no la quieren agarrar y quienes la comen es porque tienen hambre y no tienen más nada que comer, porque dan una sola comida, no dan desayuno ni cena; incluso tenemos que llevar para que nos echen la comida en cualquier perolita y comemos con las manos, porque no hay platos ni cubiertos»; expresó un familiar.
«Yo me acuerdo que antes daban desayuno y almuerzo, a veces cena y la comida era balanceada: llevaban por ejemplo crema de arroz y pancito integral con mantequilla en la mañana, de almuerzo una sopita y una buena presa de pollo horneado con arroz con tajadas o ensalada, jugo y frutas de merienda y el menú era distinto para los que tenian dietas diferentes» acotó a decir un visitante.
Sardina en mal estado
Este menú lo alternan sólo con proteína que repiten frecuentemente produciendo el rechazo digestivo: ¿Y los que no pueden comer sardinas? ¿Cómo hacen? Uno puede comer sardina un día, pero todos los días no se puede», expresan ante la intolerancia consecutiva de la proteína de la cual algunos afectados acusan, han servido en mal estado .
«A veces la sardina viene piche y le cae mal a los que la comen, porque ya está pasada. «Piche» es cuando la sardina pica; ahí se sabe que está mala: ve el bollito que nos están dando con una sardina; esa sardina pica… A mí hijo lo intoxicó ayer, ¿Esa es la comida que le voy a dar a mi hijo? No señor…»; afirmó la madre de un afectado.
Ante ello familiares de personas recluidas en el hospital «SAD» hacen un llamado a la dirección del principal centro de salud de la zona de Paria y al gobierno regional por el mal estado que presenta la proteína que dan a los enfermos, solicitando una dieta acorde a las necesidades nutricionales de los enfermos.
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