Italia inspecciona sus embajadas y oficinas consulares en Argentina, Brasil, Uruguay y Venezuela para supervisar la gestión adecuada de sus trámites administrativos, sobre todo en relación a los procesos de reconocimiento de ciudadanía italiana.
Las inspecciones «continúan en las últimas semanas» por orden del ministro de Exteriores, Antonio Tajani, «para verificar la correcta gestión de prácticas administrativas y consulares y, en particular, la regularidad de procedimientos vinculados al reconocimiento de ciudadanías italianas», informó su oficina en un comunicado.
«Las misiones de inspección se enmarcan en una acción integral» que puso en marcha Tajani al asumir su cargo, «para combatir y prevenir los fenómenos ilícitos y seguir mejorando la calidad de los servicios prestados por la red de Exteriores», concretó la nota.
Las inspecciones vigentes en las sedes diplomáticas de Italia en estos países latinoamericanos se añaden a otras supervisiones hechas durante 2023 en las embajadas de Congo, República Democrática del Congo, Sri Lanka, Bangladesh y Pakistán, «con la meta de comprobar irregularidades relacionadas con procedimientos relativos a la expedición de visados para Italia», especificó Exteriores.
Argentina, Uruguay, Venezuela o Brasil son países con sectores de población descendientes de inmigrantes italianos y es usual que parte de sus habitantes intenten hacerse con la ciudadanía italiana.
En lugares como Argentina, ante su inestabilidad política y económica, el proceso para conseguir ciudadanía del país transalpino se ha convertido en un trámite muy solicitado.
Ante ello, Italia abrió este año en Argentina una tanda de turnos extraordinarios para agilizar los trámites a nivel digital para la obtención del pasaporte para aquellos que ya tienen la nacionalidad, según informa prensa argentina.
A su vez, de acuerdo con medios locales argentinos, a fines de 2023 Italia tuvo que imponer medidas de prevención para evitar que gestores digitales sacaran turnos para el trámite de ciudadanía que después eran vendidos, aprovechándose de que el sistema de petición de citas se encontraba desbordado.
EFE