La política mundial, y nuestra época en general, vive tiempos de mucha turbulencia, tiempos donde predominan la falta de compromiso, la falta de apego sólido e invariable a principios esenciales, la ambigüedad política e ideológica que hace que hoy se está en una acera y el día siguiente en la acera contraria, y todo esto sin que siquiera nos despeinemos, ante estas evidencias tan contradictorias. Lo que es anormal ha pasado a ser normal, y viceversa. Esto no sólo sucede en Venezuela. Y eso trae confusiones a lo interno de las propias organizaciones políticas y de su militancia.
A principios del año 2023 la UPP89 tomó una decisión difícil para la organización. Nos confrontamos con la decisión de participar o no participar en la Primaria. Participar en una Primaria que, si bien se planteaba con mucha amplitud, era un proceso electoral donde participarían esencialmente organizaciones políticas de derecha, siendo la UPP89 una organización cuya orientación mayoritaria es de izquierda. Venimos del chavismo y no lo negamos, pero también venimos de un proceso político, iniciado en 1998, agotado y, aún más, que había entrado en un estado de postración, que hemos calificado, de avanzado proceso de metástasis.
Era necesaria una decisión, era necesario «Elegir un Camino» que trascendía al plano político e ideológico, y que ubicábamos en el plano ético, e incluso existencial. Participar y trabajar la UNIDAD, partiendo del reconocimiento del otro, y entendiendo el valor del pluralismo y de la diversidad política e ideológica. Valores también en desuso, pero a los cuales hay que aferrarse y trabajarlos. Y lo hicimos con el sector de la oposición que, consideramos, era y es susceptible de ser unido. Y lo hicimos bajo la convicción, que, a pesar de las diferencias políticas e ideológicas, era posible conseguir espacios de coincidencia y, muy particularmente, nos referimos de coincidencia en el plano ético. Y, además, con el aporte invalorable del trabajo encomiable de venezolanos de genuina honestidad, como los miembros independientes, de la sociedad civil, que conforman la Comisión Nacional de Primaria.
Nuestro compromiso con la UNIDAD es inquebrantable. Y apoyaremos, sin ambigüedades, al candidato o candidata que triunfe en la Primaria. El país debe reencontrarse consigo mismo y transitar caminos de prosperidad y bienestar para su población. La sola evidencia de más de 7.000.000 de compatriotas que han salido del país, es suficiente para sacudirnos en nuestra conciencia. Sabemos, y no deja de preocuparnos, que hay muchos dimes y diretes, en las filas de la oposición, muchas declaraciones que causan revuelo, poco reflexivas, personalistas, individualistas, que parecieran no tener capacidad de entender el momento histórico.
Estas diferencias no son lo esencial y no deben separarnos del camino. La política no es un camino de rosas. Todo esto lo asumimos con mucha paciencia y serenidad. Y, en este sentido, no podemos validar la posición pública que, en las últimas horas, ha asumido nuestro candidato César Almeida. En nuestra opinión, desde la incomprensión, de los tiempos que vivimos.