(EFE).- Un total de 8.660 personas señaladas como «mineros ilegales» han sido expulsadas de la región amazónica de Venezuela desde el 1 de julio, cuando comenzaron estas evacuaciones realizadas por militares, informó este jueves el comandante de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), Domingo Hernández Lárez.
Señaló -a través de Twitter- que este desalojo se ha llevado a cabo en el parque nacional Yapacana, un área cercana a Colombia y Brasil protegida por el Estado venezolano, sin dar detalles sobre el destino de las personas expulsadas o si enfrentarán algún proceso penal.
Subrayó que las evacuaciones se hacen a través de una «ruta segura» y «con el debido respeto y garantía de los derechos humanos de los mineros ilegales, quienes, violando el ordenamiento jurídico territorial venezolano, estaban dedicados al ecocidio de tan importante reservorio natural».
El comandante informó también de la incautación, en el Amazonas venezolano, de una embarcación colombiana con «más de 2 toneladas de material logístico y 1.250 litros de combustible de contrabando, destinados a ser usados para el abastecimiento y soporte de la minería ilegal de grupos armados generadores de violencia».
En sus mensajes no explicó si hubo detenidos por este caso.
El desalojo de personas, que según la institución militar abandonan el lugar «de manera voluntaria», comenzó el 1 de julio por orden del presidente Nicolás Maduro, quien pidió a la FANB «limpiar» la Amazonía de la minería ilegal, una práctica a la que se dedican unas 10.000 personas, de acuerdo a sus cálculos.
El Gobierno prepara un plan de reforestación de las zonas afectadas por la minería ilegal, especialmente por el uso de mercurio, el cual prevé poner en marcha una vez complete el desalojo de todas las personas que se dedican a la extracción de minerales en estas zonas.