Yira Yoyotte
Familiares de los privados de libertad que se encuentran recluidos en algunos calabozos policiales de la Isla de Margarita, estado Nueva Esparta, informaron que ante la inexistencia de servicios odontológicos gratuitos, los detenidos se extraen las piezas dentales entre ellos mismos.
Los denunciantes indicaron que con frecuencia los presos deben enfrentar dolencias bucales y al no contar con especialistas dentro del lugar de reclusión deciden extraer sus dientes y muelas de manera improvisada.
“Las extracciones de piezas dentales son la única solución para ellos, debido a que la salud odontológica pública es deficiente”, indicó una de las denunciantes.
María Romero, familiar de un privado de libertad del Centro de Detención Preventiva de Ciudad Cartón, destacó que en la isla no hay servicios odontológicos gratuitos. Agregó que por tal razón los detenidos pierden con mucha frecuencia los
dientes y las muelas cuando cualquiera de estas piezas presenta caries y no pueden hacerse, por ejemplo, los llamados tratamientos de conducto. “Simplemente la solución es sacarlos, ya sea en la celda o en el servicio del Hospital Luis Ortega”, dijo Romero.
Permisos tardan en llegar
Tal como lo han denunciado familiares, abogados y defensores de los derechos humanos, para que un privado de libertad sea llevado a un servicio de salud público o privado, requiere de la permisología que se aplica en estos casos.
En este sentido los funcionarios o custodios destacaron que dichos permisos,expedidos por la Fiscalía de Derechos Fundamentales o el tribunal de la causa, demoran demasiado y muchas veces nunca llegan, incluso, ni en casos de enfermedades terminales.
Juan José Mata, jefe de la Sala Transitoria y Resguardo de Detenidos de PoliManeiro, comentó que un reo requería atención odontológica de emergencia, pero nunca le llegó el permiso. “Ante esto decidió sacarlo sin este requisito, por humanidad”, dijo.
Ante esta grave e inhumana situación los familiares de los reclusos indican que deben aplicarse jornadas odontológicas preventivas para los presos dentro de los Centros de Detención Preventiva (CDP) del estado Nueva Esparta y el resto del país.
“La Gobernación de Nueva Esparta debería usar el vagón de odontología del Tren de la Salud para atender a los presos. También son seres humanos, muchos prefieren sacarse los dientes a seguir con ese dolor”, dijo Rosa García, familiar de un reo del CDP de Pampatar.
García indicó que después de una extracción dental la persona debe tomar antibióticos a efectos de evitar una infección, pero esto tampoco es posible cuando se trata de un privado de libertad.
“Muchos toman los antibióticos que les llevan sus familiares, pero de manera incorrecta, con las pastillas que tengan, sin ningún control”, expresó García.
Esta información se conoció a través de una alerta emitida por el periodista Mario Guillen, de la ONG Una Ventana a la Libertad.
A propósito de este tema, cabe destacar que las mujeres que se encuentran tras las rejas no cuentan con toallas sanitarias o papel higiénico para enfrentar los períodos de menstruación.
Ante la mencionada carencia las privadas de libertad optan, en el mejor de los casos, por ponerse “trapitos” que cortan de una vieja franela o sábana.