En particular, en las últimas 72 horas la dictadura chavista ha arreciado su persecución, todo esto mientras actualmente se encuentra en Caracas el alto comisionado de Naciones Unidas para los derechos humanos, Volker Türk.
El martes 24 de enero el Parlamento chavista aprobó en primera discusión a un proyecto de ley para ilegalizar a las ONG que trabajan en el país. El primer vicepresidente del PSUV, Diosdado Cabello, informó que ya han identificado más de 60 organizaciones que serían las primeras afectadas.
El miércoles 25 de enero agentes policiales irrumpieron en la casa del jefe de redacción del diario El Nacional, José Gregorio Meza, y se lo llevaron a una sede policial para un interrogatorio por un reportaje publicado sobre los testaferros del hijo de Nicolás Maduro. Además fueron citados otros cuatro periodistas.
El miércoles 25 de enero funcionarios de inteligencia allanaron las viviendas en Caracas de las diputadas opositoras Dinorah Figuera y Auristela Vásquez.
El jueves 26 de enero agentes del Servicio Bolivariano de Inteligencia (SEBIN) allanaron la vivienda del dirigente opositor Luis Bustos, subsecretario de la Asamblea Nacional de 2015.
Este viernes 27 de enero agentes no identificados detuvieron a la defensora de derechos humanos María Fernanda Rodríguez, menos de 24 horas después de que la activista participara en una reunión con el Alto Comisionado de la ONU para los DDHH, Volker Türk.