El pasado domingo 9 de octubre, a las 5:25 de la tarde, una mujer fue llevada al Servicio de Emergencia del Hospital General de Higuerote, en el estado Miranda. Un hombre, quien dijo ser su esposo, la llevó cargada en evidente estado de inconsciencia.
Gabriel Franzese, Médico General Tipo I estaba de guardia en ese momento. Al recibir a la paciente le tomó de inmediato los signos vitales y giró instrucciones a las enfermeras para que se practicara el protocolo de ley. Todo el personal comprobó que no había frecuencia cardíaca ni respiratoria y que tampoco había saturación de oxígeno.
“El electrocardiograma está en cero, la paciente está muerta”, dijo el galeno. El esposo de la mujer, a quien se le permitió ser testigo del procedimiento, también escuchó el diagnóstico.
Franzese se percató que la mujer, identificada como Bersabeth Liendo, de 33 años de edad, tenía sangre en la boca y en la nariz, pero era una sangre seca, es decir, la occisa había sangrado horas antes de ingresar al centro asistencial.
Ante este hecho el galeno preguntó qué había sucedido y qué enfermedad previa tenía la mujer. El esposo de la occisa se limitó a decir que había un informe del año 2020 en el cual se indicaba que ella tenía tuberculosis.
“En aquella oportunidad la remitieron al Hospital El Algodonal en Caracas, pero nunca la llevamos porque no tenemos plata para eso”, dijo el hombre de aproximadamente 40 años de edad.
Al lugar llegó un adolescente quien dijo ser hijo de Liendo. El joven, desconsolado, informó que en horas de la mañana la mujer había vomitado sangre y ratificó la existencia del informe médico emitido en el año 2020.
El joven se retiró del lugar bajo la promesa de buscar el documento y entregarlo de inmediato en ese centro asistencial.
Un funcionario policial de la Policía Municipal de Brion fue testigo de todo lo sucedido. Al conocer el fallecimiento de la mujer le informó al esposo que sería detenido por averiguaciones. Dicha detención no se realizó de inmediato a efectos de esperar el documento que el hijo de la occisa entregaría, tal como lo prometió.
La morgue no tiene aire acondicionado y está inundada
Luego de hacerle otro electro y a comprobar nuevamente el deceso, el cuerpo sin vida de Liendo debió haber sido llevado a la morgue del mencionado hospital, pero el traslado no se realizó porque ese lugar no tiene aire acondicionado y se encuentra inundado por las fuertes lluvias.
“El cadáver de la mujer fue llevado en camilla hasta un pasillo muy cercano a la morgue, mientras tanto su marido se encontraba en la Sala de Espera custodiado por los funcionarios policiales”, relató el médico Gabriel Franzese.
Según el galeno en ese momento se escucharon unos gritos en el área de emergencia. Agregó que se trataba de un hombre en estado de ebriedad que dijo haber sido picado por una culebra.
“El hombre, evidentemente muy ebrio, no se dejó examinar y agredió a una de las enfermeras que se encontraba de guardia. Los policías lo sacaron del lugar para evitar un hecho de violencia mayor”, explicó Franzese.
¡Estaba viva, usted la mató!
Mientras todos trataban de sacar del área de emergencia al hombre supuestamente picado por una culebra y evidentemente ebrio, una mujer logró burlar la seguridad del lugar y llegó hasta el pasillo donde yacía el cadáver de la mujer de 33 años de edad.
Franzese dijo que esta mujer dijo ser hermana de la occisa y llegó al referido centro asistencial, acompañada por más de 15 personas, entre ellas, su marido y otro hombre que grababa con su teléfono todo lo que iba sucediendo.
“Todos llegaron muy agresivos, me insultaron y amenazaron de muerte, decían que yo había dejado morir a la muer, que ella había llegado con vida al hospital. La hermana gritaba: estaba viva, usted la mató”, dijo el médico.
Para resguardarse de las agresiones, Franzese corrió hasta la Sala de Partos y desde allí llamó al director de ese centro asistencial quien le recomendó esperar hasta que la turba se calmara.
Cuenta el galeno que los familiares y amigos de la occisa, enardecidos, lograron entrar hasta la Sala de Partos y allí procedieron a agredirlo verbal y físicamente, incluso, llegaron a romperle la camisa, arrancarle una cadena y producirle escoriaciones en varias partes del cuerpo.
Al lugar se presentó Anamística Márquez, abogada del doctor Gabriel Franzese. Gracias a su intervención el médico fue escoltado por los funcionarios de la Policía de Brion y llevado hasta la sede del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) para la investigacion de rigor.
Los funcionarios de la Policía de Brion procedieron a detener a Marly Liendo, de 36 años de edad, hermana de la occisa. Todos los demás lograron huir del lugar, incluso, el hombre que hizo grabaciones con su teléfono celular.
Autopsia y otras actuaciones del Cicpc
Funcionarios del Cicpc retiraron el cadáver de Bersabeth Liendo del Hospital General de Higuerote y lo llevaron a la sede del cuerpo detectivesco en Caucagua.
La autopsia determinó que la mujer falleció porque padecía de tuberculosis (no tratada). Los detectives también lograron precisar que la sangre que presentaba el cadáver se debía a que la mujer tuvo una hemorragia digestiva, producto de una cirrosis hepática.
“Es por esta razón que yo nunca fui detenido, el Cicpc comprobó, mediante exámenes forenses, que la mujer había muerto a las 3:30 de la tarde, es decir, mucho antes de haber ingresado al hospital”, dijo Franzese.
Los exámenes forenses practicados al doctor Gabriel Franzese arrojaron como resultado que éste presenta lesiones en el hombro derecho, traumatismo en la cervical (síndrome de latigazo), y escoriaciones en el cuello (intento de asfixia), todo producto de las agresiones que sufrió en la Sala de Partos.
Al ser interrogado por funcionarios del Cicpc el esposo de la occisa dijo que la mujer había caído muerta en el Sector La Peñita, Primera Calle, al lado de la Unidad Educativa Gabriel Emilio Muñoz, en Higuerote.
En peligro la vida de médicos y enfermeras
A la luz de este suceso fue detenida Marly Liendo, de 36 años de edad, hermana de la mujer que falleció por tuberculosis no tratada. Las autoridades abrieron una investigacion por las agresiones perpetuadas al personal del hospital.
Liendo ya se encuentra en libertad condicional, bajo régimen de presentación y sujeta a una caución que le prohíbe acercarse al médico Gabriel Franzese, al hospital y a cualquier otro trabajador de ese centro de salud.
Franzese y el resto del personal del Hospital General de Higuerote temen por su vida y su integridad física debido a que el hombre que grabó lo sucedido, incluyendo la imagen de la mujer fallecida, subió los videos a una red social denominada Kawuaii.
“La publicación de esos videos y su transmisión a través de WhatsApp ha provocado toda una situación de inseguridad en contra de mi persona, mi familia y todo el personal del Hospital General de Higuerote, tanto es así, que no he vuelto a mi lugar de trabajo y hasta mi hija ha sido víctima de acoso escolar”, dijo Franzese.
El profesional de la medicina, al ser consultado sobre el tema, dijo que el hombre que hizo las grabaciones, al parecer, responde al nombre de Melvin Rodríguez, un pescador de la zona. Los videos que publicó en sus redes tienen “una marca de agua” que dice “Crónicas de Sucesos. Edixon Manuel”.
“Ese hombre asegura en los videos que soy un asesino y eso es completamente falso, por tal razón estoy estudiando la posibilidad de demandarlo por difamación. Haber publicado la imagen de la occisa, sin cubrir su rostro vulnera el derecho al pudor y a su memoria”, dijo el médico.
Franzese se graduó en la Universidad Bolivariana en el año 2019. Asegura que goza de muy buena reputación profesional y en la zona de Higuerote lo consideran “un héroe” porque durante la Pandemia del coronavirus se entregó en cuerpo y alma para salvar la vida de los lugareños.
Tanto él como todo el personal del Hospital General de Higuerote reiteran que no hubo negligencia médica y piden eliminar los videos de las redes sociales y, por su puesto, más seguridad en los alrededores de este centro asistencial.
Casos como éste demuestra en eso que llamamos “La Venezuela profunda” cualquier cosa puede suceder.